Editorial

Las autoridades de la Junta Central Electoral y del ministerio de Interior y Policía acordaron establecer estaciones de consulta maestra de cedulados y las informaciones del Registro Civil para viabilizar el Plan Nacional de Regulación de Extranjeros.

Esas facilidades incluyen la dotación de más de 200 equipos para la captura de los datos biométricos y recoger la firma de la población irregular migrante en las diferentes oficinas y en las gobernaciones provinciales.

Como se observa, se trata de una valiosa demostración de buena voluntad del gobierno ante los extranjeros migrantes que precisan de documentos que avalen su presencia en el país, para lo cual las autoridades actúan de manera integral, a los fines de hacer cumplir la sentencia del Tribunal Constitucional y el mandato de los organismos que norman el problema migratorio en el país.

Pensamos que esos ciudadanos migrantes deben acogerse al Plan de Regulación, aprovechando al máximo las citadas facilidades, con lo que sin lugar a dudas, inician un proceso de orden enteramente legal, como acontece en todas las naciones organizadas del mundo y con lo que se evitan momentos de incertidumbre al encontrarse, como realmente están, al margen de las leyes dominicanas en esa materia.

Apelamos, no sólo al entendimiento de estos extranjeros migrantes irregulares, no importa su nacionalidad, para que asuman como una excelente oportunidad las facilidades puestas a su favor, sino a la conciencia de quienes en muchos casos hacen uso de esa mano de obra extranjera ilegal o irregular, para que le ofrezcan las facilidades y la debida orientación a esos laboriosos trabajadores para que se incorporen a tiempo al irreversible y obligatorio Plan Nacional de Regulación. Esta acción de buena voluntad, tiene que ser de doble vía.

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