SANTO DOMINGO, el 21 de noviembre de 1961, le fue restaurado el nombre a la ciudad de Santo Domingo, que había sido cambiado en 1935 por el de Ciudad Trujillo.
El proyecto convertido en ley en virtud del cual se cambió el nombre a la capital dominicana por el de Ciudad Trujillo, fue sometido por el senador de Santiago, Mario Fermín Cabral.
Cuando lo hizo, el legislador tenía el criterio de que “el pueblo de Santo Domingo, primero, y la nación entera, después, deseaban que a la vieja ciudad se le diera el nombre de su reconstructor insigne”.
El senador Mario Fermín Cabral, en un mitin celebrado en la ciudad de Santiago de los Caballeros, en el local de la sociedad Amante de la Luz, el 12 de julio de 1935, pidió que se rindiera a Trujillo un homenaje nacional, consistente en el cambio de nombre de Santo Domingo por el de ciudad Trujillo.
Al reseñar el acontecimiento el periodista y escritor Ramón Marrero Aristy anota:
“La nación se adhirió en forma unánime a esta proposición del senador Cabral, y en todo el país se realizaron diversas manifestaciones en apoyo al trascendental proyecto”.
Al reaccionar en torno a la iniciativa, aunque agradeció el gesto, el Presidente Trujillo la rechazó y dijo que una de sus más caras aspiraciones de patriota y gobernante es la de mantener la Nación dominicana íntimamente vinculada a sus gloriosas tradiciones, que constituyen las páginas más interesantes de la civilización del Nuevo Mundo”, pero la idea de Cabral terminó convertida en realidad.
La ciudad de Santo Domingo llegaría a ser Ciudad Trujillo, hasta el 21 de noviembre de 1961, cuando se restauró su nombre original.