México, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Grandes poetas de varios países, entre ellos dos premios Nobel de Literatura, rindieron hoy tributo póstumo a Octavio Paz en la capital mexicana, al cumplirse el centenario de su nacimiento.
En un acto efectuado en el Palacio de Bellas Artes, que contó con la asistencia de Wole Soyinka, de Nigeria, y Derek Walcott, de Santa Lucía, ambos portadores del alto galardón sueco, varios autores leyeron poesías propias y de Paz ante una sala colmada de público.
Otros de los participantes en el recital fueron el italiano Valerio Magrelli; el serbio Charles Simic; el sueco Lasse Söderberg; la uruguaya Ida Vitale; el egipcio Fabio Morábito y el español Rafael Vargas.
Antes del inicio de la ceremonia, los asistentes guardaron un minuto de silencio en memoria de Helena Paz Garro, quien falleció la víspera en la ciudad de Cuernavaca y era hija del más reconocido de los poetas mexicanos, también Premio Nobel en 1990, y de la igualmente literata Elena Garro.
La velada concluyó con las lecturas de Walcott, que leyó de su creación los poemas Islas y Juncos del mar, para luego dar paso a un fragmento de Piedra de sol, obra de Paz, en la voz grabada de su propio autor.
Por otra parte, durante una ceremonia realizada en la Biblioteca José Vasconcelos para rendir homenaje al poeta, el presidente Enrique Peña Nieto calificó a Octavio Paz de alma universal que defendió los mejores valores del ser humano y abogó por la democracia, la libertad de crítica y el diálogo.
El mandatario consideró que el Premio Nobel de Literatura 1990 fue la mente mexicana más clara, plena y brillante del siglo XX.
Por medio de su obra proyectó con grandeza el nombre de México en el mundo, es el único nacional que ha sido galardonado con ese lauro y, sin dudas, el más universal de nuestros pensadores, expresó el jefe de Gobierno.
Peña Nieto afirmó que el homenaje al autor del reconocido ensayo El laberinto de la soledad será todo el año, con la finalidad de difundir y recordar su legado.
Tras reiterar su pésame a la familia por la muerte ayer de la hija del poeta, la también escritora Helena Paz Garro, el dignatario remarcó el compromiso del Gobierno de la República con la libertad de expresión y el derecho de los mexicanos a ser informados, valores defendidos por el escritor.
Como otra de las lecciones de Paz, el titular del Ejecutivo señaló la obligación de fomentar el diálogo entre los sectores sociales, y por ello apuntó que su administración se nutrirá de las ideas de los intelectuales y promoverá el trabajo que estos realizan.