Tras 18 años representando a la República Dominicana en playas extranjeras con el Seleccionado Nacional de Voleibol, Milagros Cabral, narra sus experiencias, todo cuanto pasó para formarse como jugadora y sus planes a corto, mediano y largo plazo dentro del Deporte, actividad que dice ama con toda su alma.
Al comparecer en la entrevista «Con los Protagonistas y Leyendas del Deporte», que produce cada semana la Secretaría de Deportes del Partido de la Liberación Dominicana, que preside el miembro del Comité Central, Felipe Payano, Milagros Cabral, afirma que el voleibol es su vida y si vuelve a nacer, sería voleibolista de nuevo.
«En esta etapa de mi vida, tras 18 años de haber jugado las diferentes categorías y selecciones nacionales, quiero enseñar y pasar hacia delante todo lo que aprendí», dice con orgullo.
Manifiesta que se siente orgullosa de ser parte del equipo que acompaña al Ministro de Deportes, doctor Jaime David Fernández Mirabal, quien la honró la colocarla como Directora de Deportes en el Distrito Nacional a pocas semanas de haber llegado al cargo en agosto de 2012.
«Estoy viviendo una nueva experiencia y cuando vamos a inaugurar una cancha o un estadio, puedo ver los ojos de felicidad de cientos de jóvenes del Distrito Nacional», precisa.
Su mejor momento: El Oro en Panam 2003
Sus ojos se humedecieron de la alegría, parecería que como si viviese el momento otra vez. Cabral comenta que el oro ganado ante Cuba en los Juegos Panam 2003 en el Centro Olímpico, ha sido su mejor momento en el deporte, algo inolvidalbe.
«Cuando el autobus iba camino al Centro Olímpico vimos a muchas personas con cartelones en las calles pidiéndole que ganaran oro ante Cuba y eso les puso mucha presión», expone.
Dice que ver aquella instalación con ocho mil fanáticos y millones viendo el juego por la televisión, les hizo saber que tenían una gran responsabilidad sobre sus hombros y que tenían que darlo todo en la cancha.
Juego terminó 3-2 a favor de la República Dominicana y el último set quedó 15-13.
Sus inicios
Milagros Cabral apunta que el voleibol en su niñez no le gustaba, ya que sentía ciertos «complejos» al saber que tenía más estatura que sus compañeras de aulas.
«No me gustaba el voleibol, a mi me relajaban en la escuela porque era muy grande», recuerda hoy con nostalgia.
Expone que un día en ell año 1993 fue a unos Juegos de Don Bosco al Centro Olímpico y presenció una práctica de la Selección Nacional de Voleibol y al ver aquellas jóvenes bien altas de tamaño, se sintió contenta.
«Ahí nació mi amor por el voleibol, pues dije que si habían jugadoras altas, entonces, yo iba a entrenar», enfatiza la ex-capitana de la Selección Nacional de Voleibol.
Narra que entonces fue al club Los Cachorros y allí comenzó a entrenar voleibol.
Dice que para esa época, el club los Cahorros la escogió junto a dos jugadoras más para ir a la preselección infantil femenina, ya que se avecinaba un viaje a Puerto Rico a un Torneo NORCECA.
«Allí me encontré con Mayo Sibilia y Gioriver Arias, así como Capellán y tras verme entrenar, decidieron llevarme al viaje a Puerto Rico», apunta.
Explica que en septiembre de 1994 en el Torneo Infantil de NORCECA en Puerto Rico, la entraron a jugar y estaba muy nerviosa, ya que nunca había jugado un partido internacional.
«Pasé la bola por debajo de la malla y aquello fue todo risa», indica.
Jorge Pérez Vento
Cuenta Milagros Cabral que en 1994 llegó al país a dirigir el equipo de mayores, el cubano, Jorge Pérez Vento y en una práctica en la Juvenil, con 15 años, le hizo algunas observaciones, ya que ella no tomaba muy en serio su trabajo en la cancha.
«Usted tiene que ser responsable en lo que hace, no importa la edad que tenga», dice Milagros que la encaró así Pérez Vento y aquel reclamó la marcó para el resto de su vida.
«A partir de ahí, mi vida cambió, tomé todo en serio y gracias a esa entrega duré 18 años en la Selección de Voleibol representando mi país en eventos internacionales», opina.
Gran recibimiento
Dice que al llegar al equipo juvenil allí recibió un bonito recibimiento de las jugadoras estelares del momento como eran Cosiris Rodríguez, Francia Jackson, Nurys Arias, Eveling Carreras, Indy Nova, entre otras.
«Ellas a pesar que yo era una novata me dieron confianza y me enseñaron muchas cosas lindas del juego», enfatiza. «Yo saltaba mucho y eso le gustó a Francia Jackson como acomodadora que era», insiste.
Debut en el Mundial de Japón
Milagros Cabral recuerda que ese equipo en 1998 debutó en el Campeonato Mundial de Voleibol de Mayores en Japón y solo ganaron un partido y fue a Alemania, un equipo mundialista y eso las llenó de júbilo.
«Eso nos dio confianza y luego vinieron grandes batallas contra Cuba, quien tenía gran tradición en el voleibol mundial y olímpico», añade.
Reforzó a los 16 años
Milagros Cabral indica que consiguió un contrato para reforzar en Japón a los 16 años y sus padres pusieron la condición de que tenía que estudiar allá. Estaba en tercero del bachillerato.
«Me marché a Japón y como era menor, asimismo, me trataban, estaba aislada, aunque me daban buen trato», afirma.
Explica que lloraba todos los días porque estaba lejos de su tierra y de su gente.
Dos Juegos Olímpicos
Declara que haber ido a dos Juegos Olímpicos en Atenas 2004 y Londres 2012 ha sido algo grandioso en su carrera.
«Aproveché los Juegos de Londres para retirarme, era la capitana y como es el mejor evento del mundo, le dije a Dios al voleibol para iniciar mi otra carrera, la de Madre», dice.
Recalca que tiene a su bebé, José Armando, de dos meses de nacido, con su esposo, José Acosta, y ese ñino ha sido otra bendición en su vida.
Valora a Cristóbal Mare Hoffiz
Cabral opina que el licenciado Cristóbal Marte Hoffiz merece un reconocimiento nacional por lo que ha hecho por el voleibol femenino en los últimos 20 años.
«Su entrega por el voleibol no tiene precio, hoy somos el mejor 8vo equipo en el mundo en el Ranking Mundial de la Federación Internacional de Voleibol y eso tiene que llenarnos de orgullo a todos», dice.
Tres oros seguidos
Acota que logró tres medallas de oro en forma consecutiva en unos Juegos Regionales, en El Salvador 2002, en Cartagena, Colombia 2006 y Mayaguez 2010 y eso la hace sentir muy feliz.
«Equipo irá ahora a Veracruz a buscar la cuarta corona de oro seguida y creo que tenemos gran chance de regresar victoriosas», enfatiza.
Milagros Cabral reforzó en Japón, en Corea, en Rusia, en Puerto Rico.
Grandes talentos en la Selección
Cabral está feliz porque ha visto que el país tiene grandes talentos como Brayelin Martínez, Yonkaira Peña, Ana Binet, Candida Arias, Niverka Marte y otras que vienen abriéndose paso en el voleibol femenino en base a su trabajo diario.