La subsecretaria de Estado para Latinoamérica, Roberta Jacobson, se mostró este viernes contraria a la medida adoptada en el pleno de la Cámara de Representantes, donde un proyecto de ley busca sancionar a funcionarios venezolanos supuestamente vinculados con la violación de derechos humanos.
En una rueda de prensa en Washington, la funcionaria insistió en que no cree conveniente imponer sanciones al Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, como le piden desde el Congreso.
La medida de los congresistas aprobada el pasado miércoles encuentra el rechazo del Gobierno estadounidense, porque en Venezuela hay en marcha un diálogo nacional al que entiende hay que darle su tiempo.
Jacobson también recordó que la ley permite al Gobierno de Barack Obama imponer sanciones sin necesidad de nuevas leyes del Congreso y dijo además que no cree que sea el momento para hacer uso de esa herramienta.
No obstante, Jacobson rehusó responder si Obama vetaría la ley en caso de que la versión que maneja el Senado y la ya aprobada por la Cámara baja se armonizaran en un único texto, para cuya entrada en vigor solo sería necesaria la firma del mandatario estadounidense.
Manifestó que este tipo de sanciones deben ser usadas como una herramienta no como un fin para solucionar los problemas. Igualmente dio un espaldarazo al diálogo auspiciado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Vaticano en la crisis de la nación sudamericana.
Jacobson hizo sus declaraciones en una rueda de prensa con motivo de la próxima Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que tendrá lugar la semana próxima en Paraguay, en cuya edición del pasado año, en Guatemala, pudieron reunirse los cancilleres de ambos países, John Kerry y Elías Jaua.