Washington, (Servicios especiales de Vanguardia del pueblo) Un número creciente de personas inocentes, muchos de ellos niños y afroamericanos, son atrapados en redadas policiales como parte de una tendencia hacia la paramilitarización en Estados Unidos, advirtió una organización de derechos civiles.
La Policía se ha convertido en peligrosa e innecesariamente militarizada, reveló la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) al dar a conocer los resultados de su encuesta sobre el uso de equipos de Swat (fuerzas especiales) por agentes públicos en todo el país.
El sondeo arrojó que la institución está importando cada vez más métodos y estrategias utilizados por el ejército de Estados Unidos, lo cual establece «una paradoja sorprendente y preocupante».
Señaló ACLU que mientras el gobierno de Barack Obama completa su retirada de Afganistán y el Pentágono concluye una guerra que dura más de una década, las tácticas de la zona bélica «están proliferando tranquilamente en casa».
Los resultados de la encuesta, recogidos en el informe War comes home (Guerra en casa), evalúa al menos 818 incidentes en los que estuvo involucrado Swat llevados a cabo por más de 20 agencias de la ley en 11 estados entre julio de 2010 y octubre pasado.
Se han documentado casos de daños a la propiedad en viviendas y en el peor de las situaciones se registran muertos y heridos por la actuación de los equipos policiales «que implementan las técnicas del campo de batalla», comentó el reporte.
La búsqueda encontró siete casos en los que los civiles perdieron la vida, en tanto otros 46 fueron heridos.
Las fuerzas de seguridad utilizan cada vez más los escuadrones paramilitares para allanar casas en busca de drogas, pero los barrios no son zonas de guerra y nuestros oficiales de policía no deberían tratarnos como enemigos en tiempo de guerra, subrayó ACLU.
Los equipos Swat surgieron a finales de 1960 en el departamento de policía de Los Angeles con el objetivo de apoyar a los agentes en situaciones peligrosas tales como motines o toma de rehenes.