París, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Fuentes oficiales francesas anunciaron hoy la caída en 0,3 puntos del índice de precios al consumidor durante julio, lo cual acrecentó los temores del ingreso de la economía gala en un período de deflación.
De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Estudios Económicos (Insee), en el fenómeno influyó la temporada de rebajas del verano, así como la sobreproducción de algunos alimentos frescos, lo que provocó un descenso de nueve por ciento en este renglón.
Por el contrario, los precios de servicios, como la gastronomía y alojamiento, se incrementaron debido al período de vacaciones en todo el país, pero no fueron suficientes para compensar la caída.
La baja de este indicador, unida al estancamiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer trimestre del año, incrementa el riesgo de una etapa de deflación en Francia, así como en otros países de la Unión Europea, entre ellos Alemania, España y Portugal.
Si bien la baja generalizada de precios es aparentemente una buena noticia entre los consumidores, para la economía en su conjunto significa un duro golpe que termina por afectar a todos, señalan los especialistas.
Philippe Légé, profesor de la Universidad de Picardie, indicó que uno de los primeros efectos es la reducción de la producción y de los ingresos.
Cuando los productores y comerciantes deben vender por debajo de sus costos sencillamente suspenden sus actividades, dejan de invertir, bajan los salarios o despiden a sus trabajadores para evitar pérdidas, precisó Légé.
Aunque los artículos están baratos en las tiendas, el poder adquisitivo de las familias desciende y no pueden comprar, lo que da lugar a una especie de círculo vicioso, también llamado «espiral deflacionaria», agregó.
Para los gobiernos, explicó el especialista, el impacto se traduce en una baja de ingresos por vía de los impuestos y el aumento del valor de la deuda pública, es decir, un mayor desbalance de las finanzas y el crecimiento del déficit.
La zona euro no está en deflación, pero varios de los elementos que la provocan se encuentran presentes, entre ellos la baja de precios, el aumento del desempleo y un débil crecimiento de la economía, aseguró Légé.
Mañana jueves el Insee publicará las estadísticas correspondientes al PIB en el segundo trimestre de 2014, que permitirán prever cuál será el resultado a finales de año.
Durante el período enero-marzo, el crecimiento de la economía francesa fue de cero por ciento.