Brasilia, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó que la contracción en un 0,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre de este año es algo «momentáneo».
Se trata de un resultado transitorio, pues vamos a tener una gran recuperación en el segundo semestre de este 2014, resaltó Rousseff en declaraciones a medios de prensa en la ciudad de Salvador, estado de Bahía.
Puntualizó que los numerosos días festivos concedidos durante el Mundial de fútbol organizado por el país contribuyeron a la paralizaron las actividades en fábricas y empresas, y originaron un descenso del PIB.
La mandataria, quien aspira a ser reelegida en las elecciones de octubre próximo, descartó asimismo que el país este en recesión y reiteró que la nación tiene las condiciones para retomar el crecimiento de su economía.
Poco antes, el ministro de Hacienda, Guido Mantega, atribuyó los malos indicadores del segundo trimestre a la crisis internacional, los efectos adversos de la sequía en el país, que motivaron un aumento del costo de la energía eléctrica, y un menor número de días útiles en junio pasado, por el Mundial de Fútbol.
Estos problemas coyunturales externos e internos fueron los causantes de la reducción del PIB nacional, enfatizó al señalar que en este tercer trimestre se evidencia una recuperación de la industria y de otros sectores.
Mantega dijo que el consumo interno debe reaccionar con la liberación de algunas restricciones impuestas a la adquisición de créditos y otras medidas adoptadas para incentivar el gasto.
Tras rechazar que la economía nacional atreviese por una recesión, auguró un tercer trimestre de crecimiento del Producto Interno Bruto.
Después de lograr un 7,5 por ciento de crecimiento en 2010, Brasil registró ascensos de 2,7 por ciento en 2011, del uno por ciento en 2012 y del 2,5 por ciento el pasado año.