París, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Francia e Italia convocaron a una cumbre europea sobre el crecimiento y empleo, ante el difícil panorama en la eurozona, marcado por el retorno al estancamiento y el peligro de una deflación.
La cita, que tendrá lugar el 6 de octubre, fue anunciada durante una reunión este sábado en el Palacio del Elíseo entre el presidente galo, Francois Hollande, y los primeros ministros y otros altos funcionarios de Italia, Austria, Bélgica, Reino Unido, Croacia, Dinamarca, Malta, Rumanía, Eslovaquia y Alemania.
«Nuestra prioridad es hacer que Europa se vuelque más hacia el crecimiento y el empleo», dijo Hollande, quien calificó de preocupante el contexto, con una reactivación demasiado débil, una inflación muy baja y un desempleo elevado.
Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el Producto Interno Bruto (PIB) en el conjunto de los países acogidos a la moneda común bajó de 0,3 en el primer trimestre a 0,2 en el período de abril a junio.
De acuerdo con la OCDE en la contracción del PIB influyeron los resultados adversos de los grandes países de la zona euro.
La economía alemana que había crecido 0,7 por ciento en los tres primeros meses, retrocedió a un 0,2 en el siguiente trimestre; mientras la francesa se estancó en ambos períodos y la italiana bajó en 0,2 puntos.
Francia debió disminuir sus proyecciones de crecimiento para este año y no podrá cumplir los compromisos contraídos con la Unión Europea (UE) sobre la disminución del desequilibrio fiscal ni este año, ni el próximo, según lo admitió el ministro de Finanzas, Michel Sapin.
Una situación similar enfrenta Italia, señaló el primer ministro, Matteo Renzi.
Con la cumbre de octubre en ese último país, París y Roma intentan lograr una flexibilización en las políticas sobre reducción del déficit, una postura que choca con la oposición de Alemania.
El encuentro informal de este sábado precedió a la cumbre de la UE en Bruselas, donde el grupo de los 28 eligió al primer ministro polaco, el conservador Donald Tusk, como nuevo presidente del Consejo Europeo, en reemplazo de Herman Van Rompuy.
También fue designada la ministra italiana de Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, como Alta Representante de la UE para la Política Exterior, en sustitución de Catherine Ashton.