Washington, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Los ataques del Pentágono contra el Estado Islámico (EI) en Iraq y Siria provocan un desgaste financiero y operativo a la Marina norteamericana a corto plazo, señala hoy el diario Stars and Stripes.
Estas operaciones impondrán cargas adicionales a la Armada porque esta tendrá que hacer mayores desembolsos de fondos en tareas de mantenimiento de sus buques y aviones además de prolongar la presencia de las agrupaciones navales en el Medio Oriente.
Una campaña duradera puede afectarla de forma significativa, porque los buques tendrán que mantenerse en la región por más de nueve meses para cumplir sus misiones, señaló el vicealmirante retirado Peter Daly, presidente del Instituto Naval, organización no gubernamental que estudia estos temas.
El artículo pone como ejemplo la situación del portaaviones USS George H. W. Bush, que apoyaba las operaciones en Afganistán antes de trasladarse al golfo Pérsico en junio pasado, para participar en los ataques contra objetivos del EI primero en Iraq y después en Siria.
También menciona al buque anfibio USS Bataam, desde el cual parten los cazas Harrier de despegue y aterrizaje vertical que atacan blancos del EI, así como el destructor coheteril Arleigh Burke, que participó en el lanzamiento de los cohetes crucero Tomahawk contra territorio sirio desde el mar Rojo esta semana.
El Pentágono ha realizado unos 200 ataques aéreos contra el EI en territorio iraquí desde el 8 de agosto pasado, así como más de 40 bombardeos en Siria esta semana para destruir objetivos de los fundamentalistas sin permiso previo del Gobierno del presidente Bashar Al Assad.
En estos golpes, Estados Unidos gasta unos 10 millones de dólares diarios y los costos de las operaciones ascenderán a decenas de miles de millones de dólares anualmente si la contienda aumenta su envergadura y dura varios años, señala un estudio publicado la víspera por el diario USA Today.