Nunca se determinó como pasó, pero el lunes 06 de Octubre, la noticia estaba en las primeras planas de los medios escritos, era el tema central de los programas de opinión, la comidilla en las redes sociales y, por ende, el principal tema en la cotidianidad de las personas. “Fallecen 11 niños el fin de semana en el Hospital Robert Reíd”. Lo que sí se sabe es que su impacto fue tan contundente que modificó el campo económico de la salud y por lo tanto, la empresa prestadora de servicio de salud, al aperturar el paso a un nuevo paradigma que coloca el derecho a la salud de las personas en el centro de las intervenciones del Estado.
En esta entrega trataremos sobre las características del nuevo paradigma. Como nace, así como cuál es su objetivo; mediante qué estrategias se implementará las intervenciones apropiadas.
Es un esquema dentro del paradigma de desarrollo no, por colocar la salud de las personas como principio, medio y fin para lograr el máximo estado de bienestar biológico, psicológico y social.
El nuevo paradigma está basado en los tres valores de la ética contemporánea: la eficiencia, por la obligatoriedad de ampliar la producción de servicios de salud como elemento indispensable para elevar el estado de bienestar de las personas; la equidad, para que cada cual acceda a los servicios de acuerdo a su necesidad y la libertad, para que las personas puedan mantener el estado de salud que le permita tener una vida larga y saludable desarrollando el máximo potencial productivo.
Es un paradigma en construcción, pues, se alimenta de las circunstancias cambiantes en las que se desarrollan las personas; multidimensional e integrador, por incorporar todos los sectores y disciplinas que intervienen en el bienestar de las personas; pragmático, por incorporar las mejores experiencias en el campo de la salud de las demás naciones y crítico, por dirigir la razón crítica hacia la liberación humana de las enfermedades.
De dilatada raíces históricas, la nueva visión de la salud nace en el año 1977, en la ciudad de Ginebra, Suiza, lugar donde se celebró la 30 Asamblea Mundial de Salud, en la que se decidió que: “La principal meta social de los gobiernos y de la OMS en los próximos decenios debía consistir en alcanzar para todos los ciudadanos del mundo en el año 2000 un grado de salud que les permita llevar una vida social y económicamente productiva”.Desde su origen, Salud Para Todos, es concebido como un proceso de mejora progresiva de la salud de la población a partir de la realidad económica, social y sanitaria de cada país, no como una meta a alcanzar.
Al año siguiente, 1978, en ALMA-ATA, Ciudad rusa de Kazajistan, se define la Atención Primaria como la estrategia para lograr tal objetivo.
Lograr tan ambicioso objetivo, Salud Para Todos; mediante la Atención Primaría como línea estratégica implica definir un conjunto de intervenciones, las mismas fueron definidas en una serie de conferencias internacionales organizadas por la OMS. Este será el tema de la próxima entrega.