El Gobierno ha dado el primer paso para crear condiciones para disfrutar los días de las festividades navideñas. Pone en circulación más de nueve mil 900 millones de pesos. Los servidores y las servidoras de las instituciones del Estado han comenzado a recibir el bono navideño, que aún los dominicanos y dominicanas prefieren llamar “Regalía Pascual o Doble Sueldo”.
La entrega lleva alegría a las familias e incrementa las actividades de las tiendas y el resto de las entidades que conforman la vida del comercio. Miles han esperado el bono navideño para alcanzar objetivos y otros para honrar compromisos. Es lo que explica el ánimo festivo de la población.
Al impacto que produce la entrega del bono navideño por las entidades estatales, se suman las empresas privadas que en total superan la partida del sector público, es decir, como dice el ciudadano ordinario: “hay mucho dinero en la calle”. Lo que vivimos es para celebrar, pero nadie debe olvidar que también son días para prevenir los hechos delictivos que se pueden prevenir.
Durante el mes de diciembre resurgen prácticas delictivas porque los malhechores quieren aprovechar el aumento del circulante que se produce durante el mes de las navidades. Los delincuentes recurren a múltiples prácticas para engañar a las personas.
Entre los que intensifican sus actividades en diciembre, están los falsificadores de billetes de distintas denominaciones de pesos dominicanos. Las autoridades han informado a la comunidad nacional que entre los billetes falsos que han puesto circular delincuentes figuran papeletas de la denominación de 2000 pesos.
Los ciudadanos y ciudadanas no deben aceptar las ofertas de los falsificadores pues en la mayoría de los casos pierden su dinero y terminan detenidos por las autoridades para fines de investigación.
De igual modo, deben adoptar medidas de seguridad las empresas de comercio. Los delincuentes se aprovechan del descuido de los propietarios o personal de seguridad.
Algunas personas han denunciado que fueron víctimas de atracos al llegar o tratar de aparcar su vehículo.
Hay lugares donde es difícil identificar a los empleados del equipo de vigilancia porque no tienen nada que permita hacer la precisión, lo que facilita las actividades de los malhechores.
En otros casos, se aprovechan del descuido de los empleados de los establecimientos comerciales o de servicio. Hay delincuentes que asaltan para llevarse el dinero de las actividades del día.
Son hechos que los ciudadanos y ciudadanas sufren cada año, porque los delincuentes piensan que las personas que van de compra llevan dinero.
En consecuencia, las empresas deben ampliar los servicios de vigilancia en las áreas de estacionamiento y en las entradas de los establecimientos comerciales. Y las familias y personas evitar lo que se puede prevenir.
Nadie debe dar lugar a hechos que dañen el ambiente de Navidad.
Celebremos sin olvidar la práctica de la solidaridad.