Washington, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Más de 260 mil familias quedaron sin energía eléctrica en el estado de California, Estados Unidos, por las fuertes lluvias, vientos y nevadas de la tormenta más poderosa en la región desde hace cinco años.
El fenómeno meteorológico provocó la cancelación de unos 240 vuelos comerciales, la caída de centenares de árboles e inundaciones en ciudades como San Francisco, Oakland y Berkeley donde también hubo que cerrar varias autopistas, y miles de personas no pudieron ir al trabajo.
Las lluvias fueron intensas en los condados de Ventura y Los Ángeles, en los que hubo inundaciones repentinas, mientras avalanchas de barro y escombros interrumpían varios tramos de la Autopista Costera del Pacífico, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
En el condado de Sonoma fueron evacuados decenas de residentes de al menos 300 viviendas de las zonas más bajas, por temor a crecidas inminentes de los ríos cercanos, en medio de la mayor sequía que ha afectado a California en varios siglos.
Entretanto, en algunos sectores de la cordillera de Sierra Nevada, en el interior de California, se prevé una tormenta de invierno con fuertes rachas de viento y acumulación de hasta 90 centímetros de nieve para las próximas horas.
En el estado de Oregón, el vendaval provocó al menos dos muertos y un número no determinado de heridos, los fuertes vientos obligaron a cerrar varias carreteras y derribaron árboles y postes eléctricos, e incluso alcanzaron, aunque con menor virulencia, al estado de Washington.
Ante la advertencia de las autoridades, los residentes en toda la región occidental del país se alistaban para nuevas afectaciones provocadas por este sistema llamado Pineapple Express, que lleva aire caliente y mucha lluvia en una poderosa corriente que llega al territorio continental estadounidense procedente de Hawai.
