Buenos Aires, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) La senadora reelecta y primera dama uruguaya, Lucía Topolansky, considera que las últimas elecciones en América Latina, desde las de Venezuela en 2013 hasta las del domingo en Uruguay, muestran que «la derecha viene perdiendo en la región».
En entrevista que concedió al diario Página 12, la compañera del presidente José Mujica, ex guerrillera y ex prisionera política de la dictadura uruguaya, destacó la importancia de los procesos regionales de integración y la relación de su país con Argentina.
Topolansky, quien se define «como una mujer de izquierda que busca el socialismo», estimó que a la izquierda latinoamericana le falta teorización, y debe «meterle contenidos a estos procesos y al concepto de populismo.»
Se manifestó así luego de evaluar que la derecha opositora llama populista a todos los líderes que han surgido en la región.
Destacó los proyectos populares y procesos revolucionarios que le han dado un giro a la política latinoamericana.
Lo más fuerte fue cuando el presidente cubano, Raúl Castro, recibió la presidencia de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se la entregó Sebastián Piñera; «esa foto 15 años atrás no era posible», resaltó la senadora por el Movimiento de Participación Popular.
A su juicio, el brasileño Frei Betto da la mejor definición en una frase sobre lo que está pasando en Latinoamérica: «Ahora la gente elige presidentes con cara de gente».
En ese concierto surgieron -señaló- liderazgos como los de Hugo Chávez, Inacio Lula da Silva, Evo Morales, Rafael Correa, Néstor Kirchner y Cristina Fernández.
Como política uruguaya, Topolansky dijo que le importa «mucho lo que pasa en Argentina y en Brasil, porque nos determinan mucho ambos países».
Se manifestó partidaria de fortalecer el Mercosur, a pesar de las dificultades que ha tenido, «porque entendemos que en un mundo que se está moviendo en bloques hay que tener uno propio y nos alegra que Bolivia esté a punto de ingresar».
«También apoyamos a la Unión de Naciones Suramericanas, a la Celac, el Banco del Sur, que han corrido un poco el papel de la OEA, un organismo internacional donde manda uno y los demás obedecen», acotó.
A la pregunta si se refería a Estados Unidos, asintió que «sí, pero con Canadá, porque siempre tiene aliados, nunca aparece votando solo».
Recordó que Uruguay hace mucho que es observador en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, y ahora lo somos de la Alianza del Pacífico «porque no podemos negar nada».
Alertó sobre el peligro de esquematizar, y convocó «a tener la cabeza abierta».