París, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Los candidatos del gubernamental Partido Socialista (PS) y del ultraderechista Frente Nacional (FN) deben pasar a la segunda vuelta de las elecciones parciales de la Asamblea Nacional, según los reportes preliminares.
Desde la primera ronda, efectuada este domingo, el PS se juega la mayoría en ese ente legislativo, pues se disputa el escaño de Pierre Moscovici, antiguo ministro de Economía de la administración de François Hollande y ex diputado por el departamento de Doubs (este del país).
Moscovici tuvo que dejar su puesto legislativo cuando fue nombrado comisario europeo de Asuntos Económicos, hace unos pocos meses, en noviembre de 2014.
Los reportes señalan que el PS obtuvo un 30 por ciento de los votos, por detrás del FN con un 34.
Igualmente muestra el alto abstencionismo y la baja participación. Esta última se ubicó en el entorno del 35 por ciento, en comparación con el 65 por ciento de 2002 y del 60 de 2007 y 2012.
Expertos llaman la atención sobre este hecho, teniendo en cuenta que ocurre tres semanas después de los atentados que tuvieron lugar en París y un mes y medio antes de las elecciones departamentales.
El PS dispone de 289 escaños en la Asamblea, por lo que está justo en el límite de la mayoría absoluta. Altos funcionarios del gobierno, como el primer ministro Manuel Valls, piden apoyo para el candidato del partido en el poder, Frédéric Barbier.
Junto a Barbier se presentaron candidatos de la izquierda; de la conservadora Unión Movimiento Popular (UMP), de Nicolás Sakozy, que quedó eliminada; y del FN, de Marine Le Pen.
El FN logró en Doubs el 36 por ciento de los votos en las elecciones europeas de 2014, por lo que ahora aspira a llegar al primer lugar de estas parciales con su postulante, la eurodiputada Sophie Montel.
Según información divulgada, Montel explotó durante las últimas semanas de campaña el «peligro islamista», sobre todo tras los atentados.
Si volviera a ser la primera en la segunda vuelta, prevista para el 8 de febrero, ocuparía el tercer escaño del FN en la Asamblea Nacional francesa.
En marzo pasado, en ocasión de los comicios municipales, el PS sufrió un severo revés y perdió la administración en unas 155 ciudades, pasando al segundo lugar por detrás de la UMP.
Apenas unos meses después, en septiembre, las elecciones parciales del Senado resultaron otro revés para el presidente Hollande, que perdió la mayoría en la cámara alta del Parlamento, lo cual complejiza su gestión aún cuando en la nación gala la última palabra en materia legislativa la tiene la Asamblea.
En este país europeo se celebrarán elecciones departamentales a dos vueltas, el 22 y el 29 de marzo próximos, en las cuales se elegirán para un mandato de seis años a los nuevos consejos del centenar de departamentos existentes.
Expertos remarcan que será la concreción de la primera parte de la reforma de la estructura territorial de Francia, que culminará en diciembre con los comicios para las regiones, cuyo número se ha reducido de 22 a 13.