SAN JUAN. Un récord de 26.3 millones de turistas viajaron al Caribe el año pasado y gastaron una cantidad sin precedente de dinero en esta región, considerada la más dependiente del turismo en el mundo, dijeron el martes las autoridades.
Es el quinto año consecutivo que el Caribe reporta un incremento en el turismo después de una crisis económica que obligó a muchos destinos a cerrar y causó una caída en las visitas y la derrama económica.
Hugh Riley, secretario general de la Organización de Turismo del Caribe, informó que el turismo caribeño se incrementó 5.3% mientras que la tasa mundial aumentó 4.7%.
Las autoridades atribuyen el alza en parte a las mejoras y aeropuertos alrededor de la región, la apertura de nuevas cadenas hoteleras y un incremento en los vuelos directos y en la capacidad de asientos en las aerolíneas.
El caribe holandés fue el que tuvo mayor crecimiento: Aruba reportó por primera vez más de un millón de visitantes. República Dominicana, Cuba y Jamaica también vieron un número sin precedente de turistas. Destinos menores como Haití, Santa Lucía y Belice reportaron una cifra récord de llegadas.
Un aumento de turistas provenientes de Canadá, Estados Unidos y Europa ayudó a lograr esas cifras.
«Esto nos habla de que la estabilidad está regresando al mercado», dijo Richard Sealy, presidente de la Organización de Turismo del Caribe.
En general, los turistas gastaron 29,000 millones de dólares en el Caribe el año pasado, un aumento de más de 1,000 millones respecto a 2013.
La región también dio la bienvenida a casi 24 millones de cruceros el año pasado, un aumento de 8%, aunque Winfield Griffith, director de investigación de la organización, espera otro cambio en el que los turistas se alejen del Caribe a medida que las líneas de cruceros intentan diversificar su producto en 2015.
Las autoridades turísticas también tienen el ojo puesto sobre Cuba, donde se prevé la llegada de más visitantes este año luego de que las relaciones entre La Habana y Washington comienzan a descongelarse.
Riley dijo que la organización planea promocionar viajes a varios destinos para aminorar el potencial impacto en otras islas.