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San Salvador, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) El escrutinio final de las elecciones para diputados y alcaldes en El Salvador, continúa hoy con normalidad, sin descanso y al ritmo que imprimen tres actas distintas con 10 maneras diferentes de votar en conjunto.

Observadores internacionales, el expresidente del Tribunal Supremo Electoral, Eugenio Chicas y el procurador de los Derechos Humanos, David Morales, entre otros, aseguraron que los comicios del 1 de marzo fueron transparentes y descartaron cualquier tipo de fraude como pretende acusar la derecha. Asimismo, el presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, afirmó que las inconsistencias surgieron fruto de la complejidad del proceso por las resoluciones de la Sala de lo Constitucional que fueron inoportunas y apresuradas.

La Sala avaló el voto cruzado en noviembre, cuatro meses antes de las elecciones, sentencia que obligó a cambios para los cuales hubo que capacitar a los miembros de las juntas receptoras de votos sin suficiente tiempo. No obstante, el trabajo de ese personal fue incansable, con sacrificio y esmero, al decir de quienes pudieron presenciar estos comicios que de antemano se esperaban que fueran los más complejos de la historia electoral de El Salvador.

El domingo, a pesar de todo ese esfuerzo, la divulgación de los resultados preliminares falló y no así la transmisión de datos como aseguran partidos de derecha, en particular Alianza Republicana Nacionalista (Arena).

Un error del sistema informático, a causa de un presunto sabotaje, impidió a la población conocer las primeras cifras la noche del 1 de marzo.

El presidente del TSE, Julio Olivo, denunció ante la Fiscalía General de la República, ese boicot para que lo investigue y deduzca responsabilidades.

El martes último, el escrutinio -al que tiene acceso la prensa acreditada y observadores nacionales e internacionales- quedó instalado, acorde con la ley electoral, y concluirá cuando termine el trabajo de las 59 mesas.

A pesar de este escenario, Arena trata de obstaculizar el proceso con la complicidad de medios aliados al partido derechista y en ese sentido descarga todo su afán contra el presidente del máximo órgano electoral, Julio Olivo.

Arena ha solicitado abrir los paquetes de las papeletas, algo que solo se puede hacer -de acuerdo con la normativa- si los sufragios impugnados del municipio o departamento cambian el partido político o coalición ganadora.

Este fin de semana continúa el escrutinio en el Centro Internacional de Ferias y Convenciones, en esta capital, y la población salvadoreña espera atenta los resultados finales.

Ya algunos datos, a partir del conteo en las mesas de votación después del cierre de las elecciones el domingo, indican que el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) ganó la alcaldía de San Salvador, la ciudad de San Miguel, y otros municipios de gran densidad poblacional.

Esas cifras indican que el FMLN pasó de gobernar el 49 por ciento de la población en 2012, al 68 por ciento en este 2015, lo cual significa un avance cuantitativo, aseveró el secretario general del partido de izquierda, Medardo González.

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