Naciones Unidas, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) informó que el conflicto en el sureste de Ucrania acumula cerca de un millón 800 mil desplazados, muchos de ellos en una compleja situación humanitaria.
Según una nota de prensa, la mayoría de las personas obligadas a abandonar sus hogares por la violencia siguen en el país, mientras unas 674 mil buscaron asilo, residencia u otras vías legales para permanecer en estados vecinos.
Desde abril del año pasado, Ucrania sufre por los enfrentamientos entre el Gobierno y rebeldes que declararon la independencia de Donetsk y Lugansk, en la región del Donbass, donde al parecer se cumple bastante el alto el fuego logrado en febrero en Minsk, gracias al apoyo de Rusia, Alemania y Francia.
La Acnur se declaró muy preocupada por la suerte de la población civil en las zonas golpeadas por las hostilidades, sobre todo en áreas bajo control de los insurgentes, quienes rechazaron el golpe de Estado de febrero de 2014, las elecciones de mayo para legitimarlo y la postura radical y anti-rusa de las nuevas autoridades en Kiev.
Donetsk y Lugansk estuvieron sometidas a bombardeos por parte de las tropas gubernamentales, con saldo de pérdidas humanas y destrucción de infraestructura, aunque las acusaciones por los ataques artilleros y su impacto en los civiles fueron mutuas en los peores momentos de la crisis.
Ambos territorios del sureste ucraniano presentan un tenso panorama, con cortes en el servicio de agua y electricidad como resultado del fuego artillero, señaló la agencia especializada de la ONU.
De acuerdo con la Acnur, continúan sus esfuerzos por asistir a las víctimas del conflicto, y en los últimos días pudo llegar a zonas antes inaccesibles de Luhansk.
El acuerdo alcanzado en Minsk entre los beligerantes incluyó el retiro de las armas pesadas hacia una línea de seguridad.
Naciones Unidas reclama a los actores de la crisis pleno respeto a lo pactado en la capital de Belarús, en aras de crear condiciones para una solución negociada del conflicto.