Washington, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) El auge del terrorismo en el Medio Oriente y el acuerdo sobre el programa nuclear con Irán ponen hoy la política exterior de Estados Unidos en el centro de los debates con vista a las presidenciales de 2016.
Este paso de la seguridad nacional a un primer plano constituye un problema para el senador republicano Rand Paul, uno de los favoritos del movimiento conservador Tea Party, quien propone reducciones a los gastos de defensa y es reacio a las intervenciones en ultramar, señala este domingo un artículo del diario The Hill.
Sin embargo, la nueva dinámica pudiera ayudar en las aspiraciones presidenciales del senador Ted Cruz -quien ya anunció oficialmente su deseo de aspirar a la Casa Blanca- debido a las posturas de ultraderecha que mantiene en este y otros temas.
Una encuesta de la cadena televisiva NBC News y el diario The Wall Street Journal mostró recientemente que 72 por ciento de los votantes republicanos están preocupados por la posibilidad de un ataque terrorista contra Estados Unidos, un incremento de ocho puntos en relación con una pesquisa de julio de 2007.
Otro sondeo realizado el mes pasado por el Centro de Investigaciones Políticas de la Universidad Suffolk, evidenció que 30 por ciento de los consultados consideran el terrorismo y la seguridad nacional como los asuntos más importantes para el país.
Para aprovechar esa coyuntura, varios de los posibles candidatos republicanos a las presidenciales del año próximo condenaron de inmediato el papel desempeñado por el presidente Barack Obama en el acuerdo sobre el programa nuclear iraní, señala The Hill.
En ese sentido se expresaron Ted Cruz, el exgobernador del estado de Florida Jeb Bush y el senador Marco Rubio. Sin embargo, Brian Darling, un exasistente de Rand Paul, asegura que el hecho de que los electores republicanos apoyen una política más coherente y fuerte, no significa que estén ansiosos por otra intervención militar norteamericana en el Medio Oriente.
Esta posición de los votantes no implica que estén de acuerdo con aventuras bélicas que provoquen la muerte de ciudadanos estadounidenses, ni que se derrochen los recursos del país en una guerra en el Levante, añadió Darling.
Además de Cruz para los comicios de 2016 en el campo republicano se vislumbran como posibles candidatos los exgobernadores de Arkansas y Florida, Mike Huckabee, y Jeb Bush, respectivamente; el gobernador de Wisconsin, Scott Walter y el de Nueva Jersey, Chris Christie, entre otros.
La exsecretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton, el vicepresidente Joseph Biden y la senadora Elizabeth Warren están entre los potenciales contendientes por el Partido Demócrata en la carrera por la jefatura de la Casa Blanca.
Las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos tendrán lugar el 8 de noviembre de 2016, en las que además estarán en juego un tercio del Senado, la totalidad de los 435 puestos de la Cámara de Representantes y poco más de una docena de puestos de gobernadores.
