Naciones Unidas, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, demandó el cese de los choques armados y los bombardeos extranjeros que lidera Arabia Saudita en Yemen, como única vía para detener el sufrimiento de millones de personas.
«Incluso antes de estos terribles combates, Yemen era uno de los países más pobres del mundo, en una de las regiones más ricas», advirtió en la instalación de consultas promovidas por Naciones Unidas en Ginebra sobre la crisis.
En declaraciones a la prensa, el diplomático lamentó el impacto en la población civil y la infraestructura básica de los enfrentamientos entre los rebeldes chiitas de la tribu huti y las tropas leales al exiliado presidente Abd Rabbuh Mansur Hadi, así como de los ataques aéreos foráneos.
Según dijo más de dos mil 600 seres humanos murieron desde marzo pasado, cuando escaló el conflicto con la ofensiva de los insurgentes y el comienzo de los bombardeos promovidos por Arabia Saudita, que busca alejar la influencia de Irán en la nación de la península Arábiga, donde aspira a contar con un gobierno aliado.
Las partes tienen la responsabilidad de detener las hostilidades y comenzar un verdadero proceso de paz y reconciliación, mientras la comunidad internacional debe apoyar los esfuerzos en esa dirección, precisó Ban a propósito de las pláticas de Ginebra.
Ante la pregunta de un periodista de si los sauditas «detendrían la agresión durante el Ramadán», el Secretario General manifestó sus expectativas de que la cercana celebración mensual del ayuno en la religión islámica no esté marcada por la violencia.
Asimismo, recordó que la ONU espera de las consultas una nueva tregua humanitaria en los combates, como la que a mediados del pasado mes permitió asistir a muchas personas.
De acuerdo con datos de Naciones Unidas, unos 20 millones de yemenitas -la inmensa mayoría de la población- necesitan ayuda para sobrevivir, entre ellos 12 millones 300 mil azotados por el hambre.
En el momento de la instalación del foro para abordar las vías de detener el conflicto, faltaba por llegar a Ginebra la delegación de los rebeldes huti, quienes controlan áreas estratégicas del país, pese a los ataques aéreos foráneos, criticados por los daños que provocan en instalaciones civiles.
Existe un problema de logística, por eso no han arribado, esperamos que lo hagan en las próximas horas, comentó Ban al respecto.
Las consultas entre los insurgentes del movimiento Ansar Allah y el gobierno de Hadi debían comenzar ayer, pero fueron pospuestas por las dificultades de los huti de llegar a la ciudad suiza.
Durante varias semanas, el enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Ould Cheikh Ahmed, realizó gestiones para garantizar el éxito de la reunión de Ginebra.