Naciones Unidas, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) El alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Antonio Guterres, manifestó preocupación por la reciente escalada en el conflicto colombiano, y pidió al Gobierno y la guerrilla avanzar hacia la paz en las conversaciones que celebran en Cuba.
En un comunicado, el diplomático, cuya oficina tiene su sede en Ginebra, alertó que los choques armados ponen en peligro el proceso instalado en 2012 en La Habana, entre la administración del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP).
Las pláticas en la capital cubana representan una esperanza para millones de seres humanos desplazados por décadas de hostilidades, pero cualquier perturbación socava las posibilidades de lograr un acuerdo, expuso.
Para Guterres, urge que los interlocutores impulsen el diálogo y tengan en cuenta la importancia de proteger a la población civil, principal víctima de los enfrentamientos en el país sudamericano.
El Alto Comisionado destacó los progresos alcanzados en las negociaciones, entre ellos el consenso para establecer una comisión de la verdad y la justicia, detener el reclutamiento de menores e iniciar el desminado en el departamento de Antioquia.
Estas medidas, junto a otros aspectos tratados en las conversaciones de La Habana, ayudarán a encontrar soluciones seguras y dignas para los desplazados y las personas en general afectadas por el conflicto, dijo.
Guterres reiteró el respaldo de su oficina a las pláticas que tienen a Cuba y Noruega como garantes.
Los bombardeos del ejército contra campamentos de las FARC-EP llevaron a los rebeldes a abandonar a finales de mayo la tregua unilateral decretada en diciembre pasado, en un escenario en el cual las partes se acusaron mutuamente de disparar las hostilidades.
