San Juan, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Las medidas que propone tomar el gobierno de Puerto Rico para enfrentar hoy su crisis fiscal y económica atentarán contra las ya precarias condiciones del pueblo, según dirigentes políticos y sindicales.
El debate se centra en el informe ofrecido en la víspera en San Juan por la economista Anne Krueger, exfuncionaria del Fondo Monetario Internacional (FMI), para impulsar medidas que disminuirán los salarios y beneficios de los trabajadores, sin gravar a las corporaciones foráneas.
«Es insostenible que la receta para sacar al país de la crisis económica comience con la recomendación de empobrecer aún más a los trabajadores, reduciendo el salario mínimo, alterando la jornada semanal y limitando derechos», planteó la senadora María de Lourdes Santiago, del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP).
La mayoría de las propuestas insisten en preservar las estructuras responsables del fracaso, aseguró la también vicepresidenta del PIP al considerar que poco faltó para que sugirieran volver a los tiempos de la libreta de jornal de los latifundios de principios del siglo pasado.
La senadora independentista advirtió que el informe de Krueger no identifica los mecanismos para encaminarse hacia la reestructuración de la deuda de 73 mil millones de dólares.
Consideró que sólo un dramático cambio de visión, una disposición real para formular un nuevo modelo de desarrollo y de gestión pública, y un reconocimiento genuino de que el problema de fondo son los grandes males del Estado Libre Asociado (ELA), la ausencia de poderes políticos y el cultivo de la dependencia.
El Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH) también se sumó al repudio a las propuestas de los execonomistas del FMI contratados por el gobierno de Puerto Rico, por considerarlas «un irresponsable atentado contra las ya precarias condiciones económicas y sociales del pueblo puertorriqueño».
«Estamos ante una crisis estructural del ELA y de lo que ha representado la dominación colonial de 117 años de Estados Unidos sobre Puerto Rico», manifestó el MINH al subrayar que la responsabilidad primaria de la situación recae sobre el gobierno de Estados Unidos, que dispone a su antojo de este país desde la invasión militar de 1898.
Según el MINH, las medidas de corto plazo no son la solución, por lo que es hora de reconocer que lo que Puerto Rico necesita es una transformación radical, sólo posible con la independencia nacional para «diseñar libremente nuestro destino».
El portavoz del Partido del Pueblo Trabajador, Rafael Bernabé, dijo que la fórmula del gobernador Alejandro García Padilla es sacar al país de la crisis vendiendo barata a su gente, empobreciendo a la gente trabajadora y desposeída, lo que no contribuirá a que se produzca una recuperación para el crecimiento económico.
