París, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) La crisis griega reveló las fallas institucionales de la unión monetaria y la necesidad de crear un gobierno económico reforzado en la Eurozona, expresó Benoit Coeure, del consejo ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE).
Si el bloque no se reforma, estará condenado a un crecimiento económico anémico y a crisis reiteradas, alertó Coeure en una entrevista publicada hoy por el periódico francés, Le Monde.
A su juicio, todos los países de la zona euro quieren que Grecia permanezca en la zona y están dispuestos a ofrecer una «solidaridad financiera sin precedentes». Por su parte, Grecia debe poner en marcha reformas que aseguren el crecimiento y la estabilidad de su economía.
En realidad, la cuestión no es si hay que reestructurar la deuda de ese país, sino cómo hacerlo para que sea realmente útil para la economía nacional, apuntó.
Representantes de las instituciones europeas y del Fondo Monetario Internacional iniciarán mañana en Atenas las negociaciones sobre el préstamo de 86 mil millones de euros, el llamado tercer programa de rescate.
El proceso comenzará luego de que el Parlamento heleno aprobara las reformas internas exigidas por los acreedores internacionales como condición para otorgar la ayuda financiera.
El primer ministro Alexis Tsipras aseveró que las fuerzas conservadoras de Europa siguen insistiendo en sacar a Grecia del euro, por ello «elegimos un compromiso que nos fuerza a aplicar un programa en el que no creemos».
En referencia a las exigencias de los prestamistas, indicó que las van a aplicar, «porque las opciones que tenemos son duras».
Varias voces del gobierno reconocieron que el nuevo programa de rescate traerá más recortes del gasto social, pero se aplicarán medidas compensatorias dirigidas a paliar los efectos negativos sobre los grupos poblacionales más vulnerables.