Buenos Aires, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) La Ley de Medios concebida para lograr un mayor balance informativo y la supervivencia de pequeños y medianos comunicadores frente a los monopolios mediáticos acaba de ser blanco del gobierno que recién asumió en Argentina.
Dos días después de jurar el cargo el titular del recién creado Ministerio de Comunicación Oscar Aguad dijo el sábado que «la regulación de la Ley de Medios no va a subsistir durante nuestro Gobierno».
Y dejó claro que la filosofía de la nueva administración sobre el tema es «totalmente contraria a la del gobierno anterior».
En la nueva visión que se impone, según manifestó Aguad, «los medios van a competir libremente en el mercado y trataremos de ayudar a los más pequeños», dijo Aguad quien era diputado nacional por Córdoba de la Unión Cívica Radical antes de ser nombrado.
El flamante ministro confirmó así la voluntad del presidente Mauricio Macri de modificar esa legislación a la que se opuso intensamente el grupo multimedios Clarín, en especial a sus regulaciones antimonopólicas.
En uno de sus primeros Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó tras asumir, Macri sacó a la Administración Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) y la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Aftic) de la órbita de la Presidencia y las pasó bajo la égida del radical Aguad.
Inmediatamente que se sentó en el despacho presidencial Macri firmó 29 decretos que entre otras modificaciones establecen cambios de nombres de ministerios, transferencias de competencias y creación de nuevas carteras que absorberán funciones de actuales secretarías.
Mediante la imposición de decretos evita así tener que elaborar proyectos, presentarlos al Congreso y encarar la oposición que pudiera surgir en los debates, y con ello agiliza los cambios que su equipo quiere introducir en la vida política del país.
El DNU para pasar la Afsca y Aftic al Ministerio de Comunicaciones fue el primer golpe contra la Ley de Medios. Además, el DNU modifica en parte esa legislación, declarada constitucional por la Corte Suprema de Justicia pese a los ataques de Clarín.
El titular de la Afsca, Martín Sabattella, quien recibe fuertes presiones para que renuncie, expresó que «las corporaciones mediáticas siempre tuvieron un rol fundamental en los períodos en los que creció la desigualdad, intentando cubrir y legitimar las acciones devastadoras de minorías privilegiadas».
En un comunicado divulgado por escasos medios, Sabbatella advirtió que con la acción de maniatar la Ley de Medios Macri «quiere comprar la complicidad de las corporaciones mediáticas».
Denunció, además, que el nuevo ejecutivo busca «retroceder en la legislación para volver a consagrar el privilegio del Grupo Clarín de controlar sin límites el sistema informativo, aplastando cualquier competencia e impidiendo el desarrollo de medios comunitarios».
«Eliminar las regulaciones que limitan la dimensión de una empresa y la conformación de monopolios informativos, es sinónimo de arrasar a las centenares de experiencias comunicacionales que surgieron en Democracia y dan cuenta de la pluralidad y diversidad de voces y opiniones que existen en nuestra Patria», concluyó.
Respecto a Sabbatella quien tiene la jefatura de la Afsca hasta 2018, el ministro Aguad estimó su permanencia en el directorio de esa dependencia un absurdo, y añadió: «Estamos viendo si la semana que viene solucionamos este problema».