Internacionales

Washington, (Servicios especiales de Vanguardia del Pueblo) Senadores republicanos se opusieron a apoyar cualquier propuesta que realice el presidente norteamericano, Barack Obama, para sustituir al fallecido juez Antonin Scalia en la Corte Suprema de Estados Unidos.

El mandatario se reunió este martes con varios legisladores de su formación demócrata y del llamado partido rojo, pero con estos últimos no consiguió acercar posturas durante el encuentro de menos de una hora que sostuvieron en la Casa Blanca.

De acuerdo con Harry Reid, líder de la minoría demócrata en la Cámara alta, los republicanos pretenden esperar por el próximo presidente para que realice una nominación al Tribunal Supremo.

A decir del congresista, Obama aseguró en la reunión que estaría dispuesto a considerar candidatos propuestos por la principal figura de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell, y el presidente del Comité Judicial de esa instancia, Chuck Grassley, pero estos no sugirieron ningún nombre.

Por su parte, Patrick Leahy, el otro senador de la fuerza azul que asistió al encuentro, manifestó a la prensa que la postura de los dirigentes republicanos no tiene sentido, ya que envía al país y al mundo la señal de que el Supremo es una institución política, cuando no lo es y no debería serlo.

Medios de prensa locales habían estimado como muy bajas las posibilidades de que pudiera alcanzarse un acuerdo en esa cita, sobre todo después de que el propio McConnell publicara hoy un artículo en el cual insistió en que el actual mandatario no debe nombrar al sustituto de Scalia.

Según escribió el legislador, el pueblo estadounidense debería tener voz en la selección. Por lo tanto, «el Senado no debería considerar a ningún nominado hasta después de la elección (de noviembre), cuando el pueblo haya hablado y tengamos un nuevo presidente».

En correspondencia con la Constitución norteamericana, el presidente nombra a los jueces del Tribunal Supremo y el Senado los confirma.

La entidad tiene ahora cuatro conservadores y cuatro liberales, por lo que el partido rojo teme que cualquier posible candidato de Obama mueva la balanza hacia la izquierda por primera vez en décadas, apuntó The New York Times.

El ocupante de la Casa Blanca, quien aún tiene por delante 11 meses en el cargo, ha reiterado que es su deber constitucional seleccionar al reemplazo de Scalia, fallecido el 13 de febrero, y quien era uno de los jueces más conservadores del Supremo.

últimas Noticias
Noticias Relacionadas