El obispo de la Diócesis de Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey, Nicanor Peña, clamó por la unidad del pueblo dominicano y que se mantenga dicha unidad bajo el lenguaje de la fe.
Las expresiones del obispo, quien es también presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, se produjeron en la homilía de la principal eucaristía celebrada en la Basílica de nuestra señora de La Altagracia ante la presencia del Presidente de la República, Danilo Medina y las principales autoridades nacionales.
“Quiere nuestra madre que todos los dominicanos estemos unidos como una sola familia y que vivamos unidos por el lenguaje de la fe”, dijo el obispo Peña.
Dijo que los dominicanos deben estar unidos por los ritos sagrados, “construyendo así la fuerza del amor y nuestra dominicanidad”, asegurando que la Virgen María está ligada íntimamente a “nuestra dominicanidad”.
En su predica el religioso manifestó que quien deje de amar a la Virgen de la Altagracia deja de amar a la patria «y ese día se pierde la soberanía».
Dijo que la Iglesia está consternada por el irrespeto a la vida en todos los sentidos, “tanto en el crimen callejero, como al que se refiere al de antes de nacer”.
Al acto religioso asistieron el presidente de la República Danilo Medina, la vicepresidenta Margarita Cedeño, la primera Dama Candy Montilla de Medina y otros funcionarios de alto nivel y cientos de feligreses quienes atestaron el templo.
EL jefe de Estado llegó acompañado de su esposa, la primera dama Cándida Montilla de Medina a las 9:45 de la mañana siendo recibido con la salva de 21 cañonazos.
A su llegada, el mandatario fue saludado por el senador Amable Aristy Casto, el gobernador Ramón Guilamo Alfonso y el rector de la Basílica, Evaristo Areche.