El Gobierno de Japón y varias empresas tecnológicas y automovilísticas han elaborado un plan para que en el año 2023 se inicie la comercialización de vehículos voladores y se utilicen en el ámbito urbano.
Tomohiro Fukuzawa, CEO de Skydrive, explicó que la idea detrás del coche volador es que se pueda obtener un precio más razonable que el de un helicóptero o un avión. «Además, es más fácil de pilotar», indicó.
Skydrive es una empresa integrante de este comité que desde hace cuatro años trabaja en la elaboración de un vehículo volador.
El proyecto para desarrollar el turismo de esta compañía ya cuenta con una financiación de más de 5 millones de dólares (4,4 millones de euros) por parte de empresas del sector automovilístico y los gobiernos de Tokio y Japón.
Aproximadamente 400 personas trabajan para la fabricación del coche volador Skydrive, que surgió de las mentes de jóvenes ingenieros que invirtieron su tiempo libre en la creación de un nuevo sistema de movilidad aérea.
Toyota es uno de los principales inversores de esta empresa, que quiere participar en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, algo que ya están negociando con la organización del evento.
Posterior, quieren que la salida el mercado sea en 2023, para afianzarlo como medio de transporte urbano en los siguientes años, algo que el Gobierno de Japón está dispuesto a acomodar mediante la creación de nuevas infraestructuras y la elaboración de leyes que regulen la circulación de estos vehículos.