Un reportaje periodístico, que encontró receptividad en los comentaristas de medios electrónicos y redes sociales reafirmó en el Partido de la Liberación Dominicana la necesidad de unificar fuerzas y trabajar con miras a las elecciones del 2020 unidos de la mano, como ha sido la dilatada tradición en el partido morado.
El reporte hace referencia que a un año y escasos meses para las elecciones presidenciales del 2020 en el escenario electoral no se ha planteado una segunda vuelta electoral, debido a que no hay una tercera fuerza política, bloque de partidos o candidato posicionado hasta ahora que indique que el próximo presidente se decidirá en segunda vuelta comicial.
Según la referencia del reporte publicado en El Caribe, por la periodista Yanesy Espinal, “solo una división del PLD o el surgimiento de una figura o partido que alcance una intención de votos de al menos 10% podrían inducir a una segunda vuelta, pero hasta el momento ninguna de esas variables se ha presentado en el escenario político”.
La reportera entrevistó politólogos quienes le confirman que solo una división del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) o el surgimiento de un segundo polo de oposición que alcance una votación de al menos 10% podrían generar una segunda vuelta en las elecciones pautadas para el 17 de mayo del 2020.
Si es un razonamiento de los analistas y especialistas en los temas políticos, con más razón en los adversarios al PLD, quienes no duermen maquinando como disminuir la fuerza peledeísta, que le ha llevado a seis triunfos electorales consecutivos alcanzando más de un cincuenta por ciento de los votos emitidos y un contundente triunfo con más de 62 por ciento en la contienda del año 2016, la más reciente.
Disminuir la fortaleza del PLD va de la mano de provocar una fractura interna, estrategia sobre la cual maquinan insistentemente.
Apuestan a la fricción
Teniendo sus enclaves en los medios de comunicación, la oposición al PLD se vale de ellos para distorsionar temas, falsear declaraciones y como dice el pueblo, poner a pelear a nuestros dirigentes.
En algunos casos desde nuestras filas se les ofrece motivos para alimentar la línea estratégica opositora con declaraciones altisonantes o manifestaciones de indisciplina.
Las normales diferencias de criterios en una organización con diferentes sectores de clase en su militancia se califican de insalvables, llegando a presentar una supuesta enemistad entre dirigentes en lo que descansa el liderazgo fundamental del Partido.
Fisura peledeísta provocaría segunda vuelta
Otro escenario que podría inducir a una segunda vuelta, según el reportaje señalado, es una división del PLD. Desde su punto de vista el 40% tiene ahora el PLD en las encuestas, en un escenario de división bajaría mínimo un 10% y que eso lo colocaría alrededor del 30% en intención de votos.
Eso también es parte de la apuesta opositora, quienes creen a ciegas que se gana debilitando el contrario, no ganando adeptos, una estrategia, que si bien puede contribuir a un triunfo, no es válida por si sola. Si no se conquistan votantes, no se hace nada con debilitar al competidor.
“Una fisura del PLD obligaría a que no haya ganador en la primera ronda” escribió un columnista en el único periódico vespertino impreso del país al valorar el reportaje aludido.
El articulista llega a esa conclusión en razón de que no se adelantan sorpresas en las elecciones del 2020, afirmando que todo se va a decidir entre el liderazgo tradicional, viendo muy escasas las posibilidades de una candidatura independiente que consiga el favor nacional.
La garantía de que en las elecciones primarias de octubre próximo no habrá doble votación, que el PLD está en el derecho reclamar, se ha presentado en segmento de la opinión pública como una contradicción en nuestras filas.
Se afirma que con ese reclamo desde el PLD se está planteando ahora unas elecciones primarias semiabiertas o semicerradas, nada más lejos de la verdad.
Preocupa posible doble votación
El Comité Central votó en octubre pasado, acogiéndose al mandato de la Ley de Partidos para escoger sus candidatos en unas elecciones primarias usando el padrón general de la Junta Central Electoral y eso no ha variado, quizás lo que inquieta es que una franja de partidos escogerán sus candidatos a final de octubre y que en las primarias de inicio de ese mes puedan votar en los partidos que optaron por las primarias usando el padrón de la JCE.
En los pronósticos electorales de una reciente encuesta (Centro Iberoamericano de Gobernabilidad, Políticas y Administración Pública), en relación con la simpatía hacia los partidos, el Partido de la Liberación Dominicana es el que más porcentaje acumula (55%), seguido del PRM (32%). Del resto de partidos, el PRD es el que más simpatía muestra (4%).
En este punto el 64% piensa que será el PLD (y sus aliados) los que ganarán las elecciones de 2020, mientras que el 26% opta por señalar al PRM (y sus aliados) como el ganador.
Solo con sus fuerzas internas el PLD ganaría las elecciones en una primera vuelta, pese a la vocación para la alianza que históricamente ha demostrado el PLD y eso lo sabe la gente y lo manifiesta en el 64% que piensa que el PLD y sus aliados serán los ganadores de las próximas elecciones.
Para no darle alimento al adversario una serie de situaciones precisan recomendar: Mantener a disciplina partidaria, respetar el liderazgo, evitar las ofensas, ver siempre al compañero y sobretodo pisar sobre la tierra, quien se eleva sin una buena base cae de lo alto y las caídas terminan siendo traumáticas o como la frase de Cervantes en el Quijote, quien aconsejó{o a sancho así; “la sangre se hereda, pero la virtud vale por sí sola lo que la sangre no vale”.