Rusia demandó a Estados Unidos poner fin a la agresiva política de sanciones contra el pueblo de Venezuela, al responder a comentarios del consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
Si una potencia del hemisferio occidental dejara de perjudicar con sanciones a Venezuela y otra en la parte oriental (Reino Unido), junto a estructuras bancarias, evitara robar millones a Venezuela, esta podría comprar medicamentos y medicinas, declaró la vocera de la cancillería rusa, María Zajarova.
Para ello, no sería necesaria el apoyo del «bondadoso Washington», consideró la portavoz, quien estimó que la ayuda bajo el rótulo «en nombre del tío Sam» no es bien digerida en la región, afirmó Zajarova en su página de Facebook.
Comentó así el llamado de Bolton a Rusia para trabajar junto a la comunidad internacional y a favor del pueblo venezolano, en lugar de enviar bombarderos estratégicos y fuerzas especiales a la nación latinoamericana.
Moscú denunció en su momento el movimiento de fuerzas especiales y medios de guerra norteamericanos a Puerto Rico y otras de sus bases militares en el Caribe, en medio de sus abiertas amenazas de una agresión bélica contra Venezuela.
Los medios de prensa rusa se hicieron eco aquí de las declaraciones de un general norteamericano que llamó abiertamente a un magnicidio contra el presidente constitucional del país suramericano, Nicolás Maduro.
El colmo de la desfachatez: primero los constructores colectivos de la democracia y defensores del imperio de la ley robaron 30 mil millones de dólares a Caracas y la abrumaron con sanciones y ahora vienen a darle vitaminas, ironizó la vocera.
De esa forma figurada la diplomática rusa se refirió a la estrategia de Washington de confiscar activos bancarios del gobierno de Venezuela y aplicarle cada vez más restricciones, para luego presentarse como portador de ayuda humanitaria.
Analistas locales destacaron el fracaso de las primeras versiones de un golpe de Estado en la nación suramericana, con abierto apoyo de la Casa Blanca, por lo que esta busca variantes para lograr el mismo objetivo: deponer el gobierno de Maduro.