Desde el inicio del presente año cuando el Partido de la Liberación
Dominicana anunciaba la Consulta Ciudadana para medir de manera
democrática la popularidad de los aspirantes presidenciales y escoger uno o una
como precandidato/a, permitiendo la participación activa de la sociedad
dominicana los más intensos enemigos de la organización política fundada por
el extinto e inolvidable líder Juan Bosch comenzaron desde sus trincheras a
frotarse las manos, a hacer pronósticos infundados, a construir historias falsas
rellenas de veneno, a tejer una serie de especulaciones sobre el futuro del
partido morado y a vaticinar debacles que iban desde la división de nuestra
organización hasta la desintegración de la misma, nada más falso.
Hoy, luego del rotundo éxito de nuestra Consulta Ciudadana en la que
participaron poco más de 502 mil dominicanos y dominicanas y que expresaron
de manera libérrima y por voluntad propia quien debe representar la boleta en el
nivel presidencial para el certamen electoral del 2024 constituyendo esto un
records y al mismo tiempo una proeza digna de admiración y respeto en las
votaciones internas para un partido político en la oposición, que en primera
instancia sufrió una ´´leve fragmentación´´ y además ha sido objeto de los más
viles ensañamientos y persecuciones políticas por parte de sectores orientados
desde un gobierno que ofrece mucho y cumple poco.
Hoy, el Partido de la Liberación Dominicana se revindica, se recompone, se
reconcilia con la sociedad dominicana, se reencuentra y se abraza con ese
pueblo que desde los gobiernos del PLD se les sirvió y se les dirigió pensando
precisamente en su bienestar, en su tranquilidad y progreso, y con él también lo
hizo el líder indiscutible de las bases moradas y del pueblo dominicano Danilo
Medina, quien por los propios resultados arrojados en el pasado proceso de
Consulta Ciudadana que concluyó con la elección de nuestro candidato
presidencial aumenta el respeto ganado frente al pueblo a la sociedad y
demuestra una vez más que es un político con profunda formación democrática, que le sirve al País no pensando en intereses particulares, que promueve la
unidad del partido y que desde este momento, junto a la extraordinaria
dirigencia nacional encabezada por nuestro candidato presidencial Abel
Martínez tiene la gran responsabilidad de guiarnos por el camino del triunfo y
que nos llevará al Palacio Nacional.