A la conclusión del sacerdote jesuita Pablo Mella en su libro “Los espejos de Duarte” de que el ideario independentista de Juan Pablo Duarte es una obra de arquitectura de sus biógrafos más recientes, se une ahora la afirmación del siquiatra César Mella de que el patricio tenía rasgos esquizoides y era “casi asexuado”, lo que pone de manifiesto la iniciación de una campaña para tratar desmitificar al insigne dominicano.
Los “haitianófilos”, como ya le identificaban los forjadores del movimiento La Trinitaria previo a la declaración de la independencia, parecen haber abierto un flanco de ataque,pues esta misma semana que coincide con la celebración del Día de la Independencia, sacan a relucir sus críticas a la figura histórica de Duarte, precisamente cuando la dominicanidad se encuentra más elevada en procura contener los ataques de racistas y de fobia a los extranjeros por parte de organismos y gobiernos extranjeros, además de un reducido grupo de criollos.
Los diarios Hoy y Acento publicaron en la semana que concluyó ayer glosas periodísticas del libro “Los espejos de Duarte”, premiada por el ministerio de Cultura el año pasado, de la autoría del sacerdote jesuita Pablo Mella, actual director del Centro Bonó,entidad que lleva la voz cantante en la campaña de naturalizar a centenares de miles de haitianos ilegales que residen en el país. En las glosas periodísticas se hace saber que el sacerdote y defensor de la nacionalidad dominicana para los migrantes haitianos encontró “dispersos” el ideario de Duarte, y que son los historiadores posteriores a la independencia y a la restauración y de generaciones aún más recientes los que le han dado la puesta en valor.
Y en el mismo día en que el periodista Juan Bolívar Díaz libera de culpa al gobierno y a la sociedad haitianas de la acción vandálica de ocupar por la fuerza el consulado dominicano en Puerto Príncipe y quemar la bandera nacional, el reconocido activista de la oposición siquiatra César Mella sostiene en la emisora Z 101 que además de indefinido sexualmente sufría ataques de depresión de rasgos esquizoides.
Díaz hace un relato con lujo de detalles de la acción de los que llama “radicales haitianos” que violentaron el consulado dominicano, y llega a afirmar que el grupo se encontraba separado a un kilómetro de los que en forma “pacífica” protestaban contra los dominicanos.
Por su parte, el profesional de la medicina Mella afirmó en su intervención de ayer que “la ausencia de Duarte en la gesta del 27 de Febrero de 1844, cuando se libró la batalla por la Independencia Nacional, y en la celebración de la Guerra de la Restauración en 1863 demuestra con esa actitud elementos de la personalidad esquizoide, que es cuando un individuo presenta falta de interés en relacionarse socialmente y por una restricción de la expresión emocional”, según lo reporta la Z 101 en su digital del mismo nombre.
Psiquiátricos y físicos del principal padre de la Patria.
En lo que respecta al diario digital Acento, esta publicación afirma que “Los espejos de Duarte, de Pablo Mella es un gran libro, para ser discutido, estudiado, analizado, y para que los historiadores que han construido la imagen del Padre de la Patria, queden evidenciados en sus buenas y no tan buenas intenciones, porque como dice claramente Pablo Mella, ha habido posiciones ideológicas, racismo, necesidad de personificar en la figura de Duarte un endiosamiento con fines no necesariamente patrióticos”, con lo que refuerza a su admirado escritor.
“Nuestras felicitaciones al sacerdote, intelectual y escritor Pablo Mella”, concluye la publicación de marras.
Lo sorprendente es que los dos Mella, el sacerdote jesuita y el médico psiquiatra dicen abrevar esencialmente en la misma fuente: el diario y los apuntes de la hermana del patricio, Rosa Duarte.
Una versión e interpretación diferente de los papeles y apuntes de Rosa Duarte, ofrece para la misma fecha en Hoy, la investigadora e historiadora Angela Peña.
En su renombrada columna “calles y avenidas” del matutino, la conocida escritora le dedica un nuevo trabajo de investigación acerca del origen e importancia histórica de la sociedad secreta La Trinitaria.
Para un considerable número de historiadores la sociedad secreta La Trinitaria fue el movimiento más significativo en las luchas por la Independencia y los trinitarios son considerados fundadores de la República, dice la escritora Peña.
A continuación, se hace un extracto de algunos párrafos significativos de su investigación publicada este domingo, como si se propusiera un mentís a los dos Mella:
“Rosa Duarte anota que su hermano recordó que bajo la Santa Cruz venció Constantino el Grande al tirano Majencio, y Juan Pablo “se creyó ser él, también vencedor, emprendiendo sus trabajos bajo la protección del signo de nuestra redención”.
Duarte llevó el juramento “y desdoblando el pliego que lo contenía dio a cada uno su copia criptográfica”. Lo leyó “con voz llena, clara y despacio y al terminar lo signó, y todos lo leyeron del mismo modo y lo signaron… Cuando signó el último, con el pliego abierto en la izquierda dijo Duarte: “No es la cruz el signo del padecimiento, es el símbolo de la redención: queda bajo su égida constituida la Trinitaria y cada uno de sus nueve socios obligados a reconstituirla, mientras exista uno, hasta cumplir el voto que hacemos de redimir la Patria del poder de los haitianos”. Los estatutos estaban en clave alfabética que solo ellos conocían.
El juramento rezaba: “En nombre de la Santísima, Augustísima e Indivisible Trinidad de Dios Omnipotente, juro y prometo por mi honor y mi conciencia, en nombre de nuestro presidente Juan Pablo Duarte, cooperar con mi persona, vida y bienes a la separación definitiva del gobierno haitiano y a implantar una república libre, soberana e independiente de toda dominación extranjera, la cual tendrá su pabellón tricolor en cuartos encarnados y azules atravesados por una cruz blanca. Mientras tanto seremos reconocidos los trinitarios con las palabras sacramentales Dios, Patria y libertad. Así lo prometo ante Dios y el mundo, si lo hago, Dios me proteja, y de no, me lo tome en cuenta y mis consocios me castiguen el perjurio y la traición, si los vendo”.
Se extrajeron sangre, firmaron con ella, “símbolo de su propia vida”, y dibujaron una cruz junto a cada rúbrica”.
Como se ve en estos relatos de los orígenes de La Trinitaria, los conceptos de patria, soberanía e independencia de los haitianos que subyugaban a los dominicanosestaban claros para Duarte, a quien se percibe como el líder indiscutible del movimiento libertario.
Asombra que ahora, por motivos puramente coyunturales de lucha política interna que reúne en un solo bloque a todos los enemigos del PLD y de su liderato representado por el doctor Leonel Fernández y el licenciado Danilo Medina, se pretenda incluso desdorar la imagen de los fundadores de la Patria, con tal de echar adelante sus proyectos de búsqueda de poder y de servir a oscuros intereses extranjeros.