Opinión

Un 8 de junio del 1999, partió el Padre Emiliano Tardif hacia la Casa del Padre. Definitivamente, un Siervo de Dios, un Siervo de Cristo Vivo. El junto a otros hermanos fundaron una Comunidad que ha dado, da y dará muchos frutos. Me refiero a la Comunidad Siervos de Cristo Vivo.

Desde jovencita fui asidua a su sede inicial, la Casa de la Anunciación en Santo Domingo donde asistía al grupo de oración Rebaño Joven. Allí le conocí. En verdad no tuve la dicha de ser tan cercana a él, pero me bastaba con oírle en sus misas y sus retiros. Aun hoy las oigo a través de cds. Siempre vigentes.

Muchos signos le acompañaron durante su vida. Enfermos se sanaban mediante su intercesión, y aun hoy después de su muerte lo hace. Lo que más me encantaba de él, era su humildad. A pesar de los prodigios que el Señor hacia a través de él, sabia reconocerse su burrito, como aquel que lo transporto en Jerusalén… y en verdad es así… es el Señor quien sana.

En una ocasión, tuve la dicha de participar en una misa de sanación donde uno de sus discípulos, el Padre José Ramón Arias también sirvió de burrito del Señor, y muchos se sanaron y liberaron… no solo físicamente, sino espiritualmente…, literalmente hablando, porque el lugar donde aconteció dicha Eucaristía fue en una cárcel de Romana donde el Ministerio de Mamachicha también se extiende, llevando la Palabra a tantos que necesitan de la Palabra de Dios y de su Perdón.

Por supuesto que evocamos el recuerdo del Padre Emiliano y uno de los visitantes que estaban en el Coro dio su testimonio, quien le conoció en dicha Provincia y le sirve desde entonces a través del Canto donde surgió otro bello Ministerio al cual pertenece., me refiero a ALFAREROS

Volviendo al Padre Emiliano, recuerdo bien que decía que a él le gustaba orar por los enfermos en las Misas, señalando que el Señor se hace presente en Cuerpo y Sangre para entregarse a nosotros, recuerdo también su gran devoción a la Madre, a María.

Les invito a buscar el libro JESÚS ESTA VIVO del Padre Emiliano Tardif el cual recoge muchos de sus testimonios no solo en el país sino por el mundo, de hecho, tuvo la gracia de morir trabajando para el Señor, en medio de un Retiro de Sacerdotes en Argentina, precisamente de donde es nuestro querido Papa Francisco quien también le conoció… lo importante es aprender con el Padre Emiliano a ser dóciles al Espíritu, a no apagarlo, sino a encenderlo por el bien de los hermanos… y por qué no? pedirle su intercesión para que nos ayude a alabar a Dios con nuestras vidas, que al fin y al cabo es lo único importante que no se pierde sino que se gana para toda la eternidad…

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