Es la expresión generalizada de las personas en calles y centros comerciales del municipio Santo Domingo Este sobre la ampliación del sistema de transporte masivo de pasajeros.
El Metro de Santo Domingo, iniciado durante la segunda gestión de gobierno del presidente Leonel Fernández, tiene el propósito de superar las dificultades que para llegar a su destino confrontan los usuarios de un sistema tradicionalmente ineficiente y costoso.
La insistente demanda de la población, autoridades municipales y otros sectores políticos y sociales, motivaron al presidente Danilo Medina a esforzar su presupuesto para continuar la obra que inicialmente sólo llegaba hasta el puente Francisco del Rosario Sánchez, en la parte alta del Distrito Nacional.
La joven sicóloga Cherlin Pérez, abordada en uno de los principales centros comerciales de Santo Domingo Este, al ser preguntada sobre su parecer en torno a la mega obra manifiesta:
“Para mí es lo máximo, porque imagínate, yo vivo de este lado en la zona oriental. Y yo lo he utilizado ya desde Villa Mella hasta la Feria, que muchas veces he tenido que irme por ahí”.
Y Agrega: “Imagínate que yo me pueda trasladar tan fácil, desde aquí hasta la Feria. Sería un placer”.
Visiblemente contenta por la prolongación la línea dos del Metro de Santo Domingo hasta la zona oriental, la joven profesional agrega:
“Claro que va a contribuir al desarrollo de la zona. Cien por ciento. Siempre la zona oriental había sido la zona más marginada de la capital, pero después de Mega Centro y ahora con el Metro, nosotros estamos entrando a la modernidad, con más oportunidades”.
Preguntada sobre su tanta confianza y alegría con la construcción del Metro en la zona oriental, prosigue: “Lo que pasa es que el Metro es más cómodo, es más limpio y hay menos peligro. Yo nunca he sabido de algún problema ahí. Ni atraco ni nada. La gente casi ni habla, fíjate que hasta la educación se nota cuando tú estás en el Metro”.
“Es muy necesario porque beneficiará a los estudiantes que van para la universidad temprano, y eso. Es muy bueno”. “Ojalá pronto lo lleven a Santiago y a Baní”, apunta.
Los Transportistas
Joel Bautista, quien se desempeña como Control de las rutas de FENATRANO que pasan por la Carretera Mella esquina San Vicente de Paul, la Padre Castellanos y otras vías de mucha afluencia de pasajeros, sobre el tema opina así:
“Nosotros no les tenemos miedo al Metro, y menos que todavía el metro lo que va es de esquina a esquina. Ahora, si tú me dijeras un metro vaya a andar la capital entera, de punta a punta”.
Al dirigente choferil se le señaló que, no obstante, la gente estaba muy contenta con la construcción, y en seguida estimó que hoy la gente está vanagloriada con el Metro en la zona oriental, pero consideró que no va a resolver definitivamente el problema del transporte en esa parte del Gran Santo Domingo porque es muy corto, y agregó:
“Si tú me dijera que el Metro va a andar la capital entera, de punta a punta, ahí si resolvería el problema, pero todavía ese Metro lo que va es de esquina a esquina, de este lado”.
Cuando le preguntamos si estaba de acuerdo con una línea que recorra toda la capital, sonrió y dijo: “pero ellos nunca lo van a hacer”. “No tienen con qué hacerlo”.
Andrea Agramonte fue otra dama entrevistada en la Parada de Autobuses de la Carretera Mella esquina San Vicente de Paul, y al igual que otros pasajeros, favoreció la rápida terminación del Metro, lo mismo que varios jóvenes consultados mientras esperaban el autobús de la OMSA, quienes dijeron que están locos porque el METRO se extienda hasta donde va a llegar: “Eso es algo que está bien, ¿tu entiendes?, porque la calle está un poquito difícil. Cogiendo pela, te maltratan. O sea cuando uno anda –como te digo- la seguridad, ¿entiende? Yo opino que está bien el Metro”, dijo Luis Antonio Melo.
Los Comerciantes
En algunos tramos de la San Vicente de Paul, donde se construye el túnel por donde transitará el Metro, los comerciantes desean que se avance lo más rápido posible, porque los equipos colocados en la vía temporalmente les reducen las ventas.
Sin embargo, sus perspectivas son que habrá un mayor desarrollo de la zona, lo que consecuentemente se traducirá en beneficios adicionales para sus negocios.
Los Motoconchistas
Los grupos de motoconchistas a lo largo de la avenida en la que se instala el Metro, también expresan satisfacción por la obra en el entendido de que contribuirá a que puedan mejorar sus ingresos, sin perjudicar en nada a los demás sectores del transporte.
Francisco Antonio Serrano, quien trabaja en un punto próximo al puente Francisco del Rosario Sánchez, dijo que “un pasajero que va del kilómetro 9 de la autopista Duarte hasta la zona oriental, normalmente se toma casi dos horas, pero que ahora en el Metro, llegará en apenas 15 minutos.
Pero además, el Metro nos traerá más pasajeros, dijo el también motoconchista Pedro Jiménez, quien observó que en principio hasta ellos fueron afectados con el polvo y los inconvenientes, pero que ya se ha normalizado la cantidad de pasajeros que transportan diariamente.