En el recién celebrado Segundo Congreso Banca y Economía de América Latina, llevado a cabo bajo los auspicios de la Federación Latinoamericana de Bancos, Felaban, el Gobernador del Banco Central de la Republica Dominicana, Lic. Hector Valdez, tuvo una destacada participación con su ponencia sobre la Republica Dominicana en el Contexto Latinoamericano e Internacional y sus Perspectivas. De dicha presentación se puede extraer una gran cantidad de datos económicos a través de los cuales abordó el tema asignado.
Visto que de lo anterior se puede construir una visión acerca del desempeño reciente de nuestra economía, su estado actual y qué podemos esperar para el año venidero, hemos considerado prudente y conveniente presentar a continuación una síntesis de los que consideramos los aspectos más relevantes y significativos de dicha presentación.
Uno de los ejes principales de la presentación lo constituyó el crecimiento de la economía en años recientes, citándose el caso del Producto Interno Bruto Nominal, para lo cual se utilizó la comparación entre las cifras del año 2003, US$20,432 millones, y las del 2013, US$61,223 millones, con lo cual se evidencia el tamaño alcanzado por nuestra economía.
Acortando el plazo de tiempo para un conjunto adicional de cifras entre los años 2005-2013, se afirma que en dicho período el crecimiento de la economía ha sido de un promedio anual del 5.7%. Ese crecimiento ha sido dentro de un marco de estabilidad de precios, manifestado por una tasa de inflación promedio del 5.9%. Otra consideración de importancia en dicho período ha sido el comportamiento de la tasa de cambio, la cual presentó una depreciación promedio del 3.9%. Todo lo anterior destaca el buen comportamiento de los índices fundamentales, permitiendo que nuestro país se encuentre en posición relevante en comparación con sus pares del área del Caribe y Centroamérica.
Uno de los indicadores sobre el cual se señaló ha estado por encima de la media de la región, es el referente al déficit en cuenta corriente, o sea, la sumatoria de las exportaciones de Bienes y Servicios (reales y financieros) menos las Importaciones de bienes y servicios (reales y financieros). No obstante, en cuanto al tan mencionado déficit fiscal, se informó que en el período señalado del 2005-2013, el mismo promedió un 2.4% del Producto Interno Bruto (PIB), índice muy cercano a la media de América Latina.
En cuanto a los fundamentos actuales de la economía, el Gobernador afirmó en su disertación que en el periodo actual 2014, para los meses comprendidos entre enero-septiembre, el crecimiento del PIB ha sido de un 7%. Así mismo, al mes de septiembre, la inflación anualizada registra un índice del 2.83%.
Otra de las buenas noticias ha sido la referente al empleo ya que se afirma que desde el 2012 se han creado en el país unos 236 mil nuevos empleos. Así mismo la depreciación interanual del peso se ha reducido a un 2.5%, y que se espera que en al año ingresen divisas por unos US$22,400 millones, subdivididas en US$5,600 millones del turismo, US$4,600 millones por concepto de remesas desde el exterior, exportaciones por más de US$10,000 millones y una inversión extranjera por los US$2,200 millones.
Una de las consecuencias de lo anterior en cuanto al ingreso de divisas es que República Dominicana presenta reservas internacionales netas por el orden de los US$4,500 millones, alcanzando para el cierre de año el equivalente a importaciones por 3.1 meses. A esto se le une el anuncio de que se espera una reducción en el nivel actual del déficit fiscal, al igual que en el nivel de déficit de la cuenta corriente.
Frente a este torrente de cifras e indicadores de carácter positivo, se vaticinó que para el próximo año, la economía dominicana ha de experimentar un crecimiento cercano al 5%, y con un nivel de inflación cercano al 4% (más o menos un 1%). Finalmente, el cuadro halagüeño se completa con una proyección de déficit en la cuenta corriente por debajo del 3.8% y un déficit fiscal del 2.4%.
Entonces, se puede concluir que un país como el nuestro, con los fundamentos macroeconómicos favorables, lo que necesita es crear mecanismos que permitan un mayor desparrame de la riqueza creada para que alcance cada vez más dominicanos, mediante mecanismos de inclusión social y económico, mejoras salariales, promoción de la competencia y viabilizando una mayor participación de los ciudadanos en la economía formal. Todo lo anterior tiene que lograrse sin desmedro de la provisión de servicios básicos de salud y educación de calidad, acompañados de una seguridad ciudadana que permita a la sociedad como un todo, vislumbrar un porvenir más promisorio.