En el día de ayer se conoció de la muerte de una paciente de 24 años de edad que fue sometida a un procedimiento estético, aparentemente para “retirar una gelatina que tenia en los gluteos”, según las palabras de un médico y abogado a los periodistas que lo abordaron en el Centro Médico Cibao.
Como hemos estado vinculados a esta especialidad en casi toda nuestra vida profesional, lo primero que hicimos fue buscar quien realizó el procedimiento, dicen los medios que el médico se llama Angel Prado, nombre que no está incluido en la lista de los miembros de la Sociedad Dominicana de Cirujanos Plásticos, y por lo tanto, inmediatamente ponemos en duda su entrenamiento profesional para realizar este tipo de procedimientos.
Es necesario que la población entienda, que la realización de una cirugía estética no es en nada parecido a realizar una visita a un salón de belleza, que todo procedimiento quirúrgico debe ser realizado por personal entrenado y certificado en dicha especialidad.
Esto debería ser materia del Ministerio de Salud en su función rectora, que está en la obligación de hacer cumplir la ley 42-01 y sus reglamentos de acreditación, certificación y re-certificación cada 5 años.
Para un profesional de la salud poder ejercer como cirujano plástico, necesita, ademas de ser médico certificado, haber estudiado dos años en una escuela de cirugía general, mas un mínimo de tres años realizando la especialidad de cirugía plástica en un hospital docente reconocido y además debería pasar un examen cada cinco años que certifique la actualización a que está obligado.
Sin embargo, en la República Dominicana, ante la mirada indiferente de las autoridades sanitarias, cualquiera con un título de medico o, como en el caso de Santiago que se dice es un médico ginecólogo, ofrece sus servicios para realizar procedimientos para los cuáles no ha recibido ningún entrenamiento y por lo tanto no está capacitado.
El agravante del caso de Santiago que nos llama la atención, es que la ¿clínica? donde se realizó la cirugía, es una casa de familia con letreros multicolores, por lo que nos imaginamos que dentro de esas paredes no existen las condiciones mínimas para operar en condiciones medianamente seguras. claro nadie se ocupa de la habilitación y cierre, en caso de no estar aptas, de las clínicas que existen en todo el territorio nacional.
No negamos que la posibilidad de complicaciones y muertes por cirugía estética existen, es mas, estadísticamente está comprobada la cantidad de fallecimientos asociados a estos procedimientos ya que, la entrada de cualquier paciente a un quirófano se encuentra asociada a un riesgo inherente a una serie de factores asociados al área quirúrgica.
Aunque sabemos que nadie nos va a hacer caso, llamamos la atención a las y los pacientes que se plantean realizar una cirugía estética, para que desconfíen de los médicos que les ofrezcan milagros imposibles de lograr, mientras mas procedimientos se realicen al mismo tiempo mayor riesgo existe de una complicación grave.
En la República Dominicana, que es el país del sálvese quien pueda, es usted el o la responsable de cuidar su vida, por esto le hacemos las siguientes recomendaciones:
Tómese su tiempo para escoger un profesional que esté certificado por la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica, exija ver su membresía, ya que es la única garantía de que pasó por el filtro de la evaluación de su capacidad para realizar este tipo de cirugía.
Pregunte quien es, y si no tiene seguridad, pida una entrevista con el anestesiólogo, este será el profesional que tendrá su vida en sus manos, por lo que también exija que sea miembro de la Sociedad Dominicana de Anestesiología, lo que le garantizará que está capacitado para realizar un procedimiento seguro.
La cirugia debe realizarse en una clínica u hospital que esté totalmente equipado para casos de emergencia, el quirófano debe poseer los medios para monitorizar sus signos vitales y seguir otras mediciones necesarias para su seguridad, además pida que le muestran la unidad de cuidados intensivos, donde lo llevarán en caso de una complicación grave.
Toda cirugía estética puede tener complicaciones no deseadas como: infecciones, sangrados, mala cicatrización y complicaciones inesperadas, entre otros problemas asociados a los procedimientos quirúrgicos.
A pesar de los riesgos, en manos de un equipo multidisciplinario experimentado, entrenado y responsable, un procedimiento de este tipo es seguro, solo que como en el país nadie se conduele de los pacientes, será su responsabilidad tomar medidas para cuidarse usted mismo.