El fenómeno de la prevalencia de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MIPYMES) en la República Dominicana ha registrado un inocultable crecimiento y una evidente evolución positiva bajo las administraciones gubernamentales del Partido de la Liberación Dominicana.
Durante los 14 años de ejercicios de gobierno del PLD, las unidades productivas de menor tamaño en el país (no agrícolas y con menos de 50 empleados) han pasado de alrededor de 230 mil en 1996 a 791 mil 324 en la actualidad, y han jugado un papel muy importante en la cohesión social, debido a que contribuyen significativamente a la generación de empleos, de ingresos, erradicación de la pobreza y dinamización de la actividad productiva.
El de las MIPYMES fue el tema principal abordado por el Presidente Danilo Medina en el transcurso del II Foro Empresarial, el cual se llevó a cabo en el marco de la VII Cumbre de las Américas, celebrado recientemente en Panamá, donde abogó por la internacionalización de las mismas y el fomento de los encadenamientos productivos.
Según una investigación de FondoMicro, hace menos de 14 años, la República Dominicana contaba con unas 359 mil 310 unidades de negocios de menor escala, las cuales aportaban cerca de 1 millón 80 mil 810 empleos, equivalente al 47 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) y al 27 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Posteriormente, en el 2002, se calculó en aproximadamente 362 mil el número de Micro, Pequeñas y Medinas Empresas existente en el país, y en 1 millón 160 mil la cantidad de empleos generados por éstas, que están catalogadas en el mundo como el motor del desarrollo de la economía.
De 362 mil, las MIPYMES pasaron a 616 mil 100 en el 2006, a 646 mil 2015 en el 2010, y 791 mil 324 en el 2014, de conformidad con la última encuesta de FondoMicro, que se hizo por encargo del Ministerio de Industria y Comercio.
El ramo de actividad predominante de las MIPYMES dominicana lo es el comercio, pues el 53.3 por ciento de los negocios se dedican a la compra y venta de mercancías, y de ellos el 20.9 por ciento es un colmado o pulpería, según las investigaciones.
El segundo puesto lo ocupa el renglón de la manufactura, al cual se dedica el 24.1 por ciento de las MIPYMES, especialmente en las aéreas de procesamiento de alimentos y bebidas, el 9.1 por ciento; confección de ropa, 3.4 por ciento; muebles y afines, 5.4 por ciento y metalmecánica, un 3.3 por ciento.
El tercer lugar está reservado para las MIPYMES del sector servicios, las cuales constituyen el 22.3 por ciento del grupo. Entre las aéreas más dinámica del renglón de los servicios sobresalen: alimentos, un 7 por ciento; salones de belleza, 5.8 por ciento, y juegos de azar, 3.7 por ciento.
El 44.2 por ciento de las unidades productivas de menor tamaño del sector comercial operan en el resto del país, el 31.1 por ciento en las ciudades y apenas el 24.7 por ciento están ubicadas en el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo.
De acuerdo con investigaciones de organismos nacionales de mucho prestigio, la inmensa mayoría de las pequeñas unidades productivas dominicanas destinan su producción hacia el mercado interno, registrándose que apenas el 6.2 por ciento coloca sus mercancías en el extranjero.
De igual manera, de las MIPYMES que existen en el país, el 42.7 por ciento coloca sus productos en mercados un poco alejados de su punto de actividad y el 32.6 por ciento vende sus mercancías a otras empresas.
En lo que se refiere a las compras de materias primas, equipos, maquinarias y mercancías de las MIPYMES, solo un 8.1 por ciento de los negocios importan directamente las materias primas o mercancías; el 56.8 por ciento compran directamente a almacenes de mayoristas; el 18 por ciento se abastecen de vendedores detallistas, y el 10 por ciento negocian con productores de materias primas.
Insistimos que conforme con la última investigación de FondoMicro, en la República Dominicana existen más de 791 mil 324 MIPYMES, lo que reafirma que las unidades productivas de menor tamaño constituyen el más importante elemento de la economía nacional.
De ellas, es bueno tener en cuenta que 772 mil 991 son Micro Empresas (el 89% informales) y que generan 1 millón 644 mil 260 empleos, mientras que 18 mil 333 (2.8% no formalizadas) son Pequeñas y Medianas Empresas, que aportan 522 mil 231 puestos de trabajo.
Actualmente, las unidades productivas de menor tamaño y que están en plena actividad en la nación representan el 98% del universo empresarial dominicano, generan casi 2.2 millones de empleos y el 38% del Producto Interno Bruto (PIB).
Esas MIPYMES surten un efecto social positivo para más de 6.6 millones de dominicanos y dominicanas, si tomamos en cuenta que los 2 millones 200 mil empleos directos aproximadamente que las mismas generan hay que multiplicarlos por un promedio de 3 empleos indirectos.
El sondeo arrojó que el 54.4% de la población trabajadora de República Dominicana pertenece a las MIPYMES y que el 51.3% de todas las pequeñas unidades de negocios que existen en la nación son de mujeres.
Como lo viene haciendo el gobierno del Presidente Danilo Medina, lo hizo Juan Bosch, en el 1963 y Leonel Fernández (1996-2000, 2004-2008 y 2008-2012) apoyemos sin reservas el emprendedurismo, la incubación de empresas, la asociatividad empresarial (clústeres, red de proveedores y encadenamientos productivos) y a las MIPYMES.
Es innegable –como acabamos de ver- que durante los gobiernos del PLD en la sociedad dominicana han surgido alrededor de 500 mil 900 nuevas empresas, con una generación de aproximadamente 2 millones de empleos y un impacto positivo en toda la sociedad.