ARENOSO.- Recorriendo estos arrozales perfectamente nivelados y asistidos de maquinarias modernas de siembra y cosecha de la planicie central del país, se puede uno agregar como testigo de los siguientes hitos:
El país acaba de alcanzar en la finalizada cosecha de primavera los 8,500 kilos por hectárea, superando el promedio norteamericano y manteniendo invariables los precios para el consumo interno por 12 años consecutivos.
Y lo ha logrado imponiéndose a una extensa sequía que ya alcanza 2 años y a la disminución del área de siembra en unas 250 mil tareas.
(La cosecha de primavera reúne poco más del 70 por ciento del total producido en el año. El restante 30 por ciento lo aporta la cosecha de invierno. El año pasado la producción arribó a los 10 millones 500 mil quintales, pero este año se espera supere los 11 millones de quintales).
Ahora en poco más de 1 millón de tareas, con casi la mitad niveladas con rayos láser, alimentadas con semillas mejoradas en laboratorios de experimentación dominicanos, el país puede afirmar que ya no le tiene miedo a los efectos de la liberación total de aranceles del arroz para el 2025 que comprometimos al firmar el Acuerdo de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica.
O sea, que la eficiencia se logró gracias a un incremento de la productividad y la disponibilidad a tiempo de financiamiento para siembra y cosecha y para la decisiva pignoración que destraba al cosechero de la ligazón al incremento de costos asociados al almacenamiento y cura del cereal post cosecha.
Para que no haya dudas, ya el Banco de Reservas adelantó que dispone de los RD$6,000 millones que demanda el sector arrocero para la pignoración de las cosechas de invierno y primavera de este año.
Testigos de los logros mencionados son el ingeniero Cesar Espaillat, presidente de la Federación Nacional de Productores de Arroz (Fenarroz), el cual se hizo acompañar de Apolinar Germosén, Presidente del Consejo Nacional de Parceleros de la Reforma Agraria; Roberto Familia, presidente de la Asociación Dominicana de Factorías de Arroz; Iván Tió, ex presidente de FENARROZ; Fausto Armando Pimentel, presidente de la Asociación Dominicana de Factorías de Arroz. (ADOFA), quienes coincidieron con las afirmaciones en el mismo sentido del ministro de Agricultura, Angel Estévez.
Destacó el ministro Estévez la gran unidad que existe en todo el sector, donde los productores, molineros, comercializadores y el Gobierno Central han mantenido una estabilidad en el precio del cereal durante los últimos 12 años. Anuncio así mismo el inicio de la pignoración para el próximo mes de mayo.
Manifestó que gracias a la presente cosecha el país avanza en la producción del cereal, lo que a largo plazo nos permitirá ser competitivos con otros países de la región para exportar nuestro producto, sostuvo que gracias a uso de tecnologías avanzadas hemos logrado superar a los Estados Unidos en productividad por hectárea, logrando establecer record por alrededor de los 8 mil quinientos kilos.
En una reunión reciente destacó la gran unidad que existe en todo el sector, donde los productores, molineros, comercializadores y el Gobierno central han mantenido una estabilidad en el precio del cereal durante los últimos 12 años.
Además aseguraron que todas las decisiones que se toman en este importante sector son discutidas y analizadas por la comisión nacional arrocera compuesta por las autoridades gubernamentales, productores, molineros y parceleros, “nada se hace de forma unilateral, sino en consenso de todos los sectores”.
La Asociación Dominicana de Factorías de Arroz (ADOFA), reconoció al presidente Danilo Medina por el relanzamiento, desarrollo y crecimiento de la producción arrocera, gracias a las políticas públicas que se han consolidado en su Gobierno.
Fausto Armando Pimentel, presidente de ADOFA, dijo que el presidente Danilo Medina no solo ha hecho grandes aportes en el sector arrocero sino en todo el sector agropecuario.
“Esto ha sido gracias al apoyo dado por el Presidente al campo dominicano, lo que ha permitido un desarrollo en las zonas rurales; los niveles de vida del campesino y del sector agrícola en sentido general han mejorado en los últimos años, gracias a esa labor que realiza al frente de las instituciones del Gobierno”, dijo.
Junto a ellos estuvo un representante de la Federación Nacional de Productores de Arroz (FENARROZ) en nombre de ese sector cosechero nacional.
El gobierno también se ha concentrado en recuperar más de media docena de factorías de arroz que habían sido abandonadas, por causas que van desde la liberación de tierras de cultivo hasta a fallas de administración o falta de recursos financieros a tiempo a disposición de sus ejecutivos. Una parte de las inactivas, tendrán que fusionarse con otras para poder ser eficientes.
Desde que el PLD reasumió el poder, en agosto del 2004, se propuso recuperar sectores básicos de la agropecuaria ligados a la canasta alimentaria, y el arroz fue su primer objetivo. Desde el mismo año 2005 el país no ha vuelto a tener que importar arroz para cubrir necesidades de la demanda. Aquí sólo se importa una pequeña cuota para consumidores de alto nivel que prefieren lo importado, y que apenas suplanta el consumo de 10 días del consumo nacional.
El éxito alcanzado por los primeros 8 años de gobierno peledeísta, ha sido consolidado en la presidente administración del licenciado Danilo Medina, quien cumplió plenamente con diez puntos estratégicos prometidos en su Programa de Gobierno hacia el campo, como lo certificara recientemente la alta dirigencia de la Junta Agroempresarial Dominicana.
Estos diez puntos son:
1- Financiamiento al campo, concediendo más de 32 mil millones de pesos en apenas tres años.
2- Apoyo a un programa de titulación de tierras que ya camina en los terrenos del Estado, que terminará con 5,000 títulos entregados.
3- Soporte a los programas de investigación y capacitación de productores y técnicos.
4- Mejoramiento del Sistema Nacional de Manejo Sanitario con calidad e inocuidad de los alimentos.
5- Rehabilitando y construyendo nuevas infraestructuras en las zonas rurales.
6- Creando nuevas políticas de fomento para las exportaciones con los casos recientes de la creación del BANDEX y el lanzamiento del programa PROSPERA del Banco de Reservas que ya ha aportado más de mil millones de pesos a sectores promisorios de las exportaciones agropecuarias.
7- Mejorando la política fiscal a favor del campo, con el establecimiento de un sistema de simple tributación a tasas muy bajas para nuestros agricultores.
8- La agilización de los procesos burocráticos que constituyen la permisología medioambiental para desarrollar proyectos agropecuarios y agroindustriales.
9- Avanzando las conversaciones para el programa de reforma institucional del marco legal de nuestras instituciones públicas del sector y;
10- Destacándose con extraordinario valor el Programa de Apoyo a la Asociatividad de Productores y Productoras del campo dominicano, llegando a constituirse en los últimos 3 años más asociaciones y cooperativas que las que se habían registrado durante los últimos 20 años de la vida republicana.
No hay dudas que el reto de liberar en el 2005 aguijoneó al gobierno y a los productores para mejorar la eficiencia y productividad en la producción y comercialización arrocera, con tal de obtener los excelentes resultados hasta ahora, en provecho también de la población que dispone de su principal alimento a un precio invariable en los últimos 12 años.
Conversamos en medio de estos arrozales con el técnico agropecuario Emilio Toribio Olivo quien ha tenido diversas responsabilidades en varios gobiernos, desde el siglo pasado, para que todo esto sea posible, y nos dijo que no podemos bajar la guardia.
“Todavía hay que mejorar aún más variedades y mantener vigilancia cercana acerca de las existentes, terminar por nivelar todas las tierras arroceras, disponer de suficientes maquinarias agrícolas y preservar las garantías del financiamiento post cosecha o pignoración. Lo demás, lo ponen los cosecheros y molineros que ya pasaron la prueba”, dijo.