Al investir al exjefe de Estado dominicano con el título “Doctor Honoris Causa”, la presidenta de la Universidad París VIII, doctora Danielle Tartakowsky, felicitó el pasado día 28 de octubre al expresidente de la República Dominicana, doctor Leonel Fernández, por el sólido respaldo solidario que ofreció al pueblo haitiano a raíz del terremoto que devastó la capital y gran parte de Haití en enero de 2010.
La doctora Tartakowsky resaltó que Fernández no sólo se solidarizó grandemente con el pueblo haitiano desde el primer momento de la tragedia, sino que hizo un vehemente llamado a la comunidad internacional para que acudiera en ayuda de Haití.
Al exponer las razones por las cuales la Universidad de París VIII decidió investir a Fernández con el título de Doctor Honoris Causa, Tartakowsky dijo que para la institución académica constituye un gran honor que el exjefe de Estado dominicano aceptara la distinción.
Destacó que, conforme a la tradición de la Universidad, el reconocimiento debió ser hecho cuando Fernández era presidente en ejercicio, pero que por diferentes razones no se pudo realizar. “Ahora es una buena oportunidad, porque así se le entrega no porque es presidente, sino por lo que él es y por todo lo que ha hecho”, proclamó.
En el marco de su discurso, Tartakowsky afirmó que Fernández representa valores que la misma Universidad París VIII ha tratado de defender durante todos sus años de existencia, entre los que citó la solidaridad y la promoción del desarrollo educativo y tecnológico, vías que considera expedita para combatir la violencia y la ignorancia.
De igual manera, la académica francesa felicitó a Fernández por el empeño que siempre ha puesto en asociar la acción política con el debate teórico, la reflexión de los intelectuales e investigadores, el desarrollo del conocimiento, el fortalecimiento de las políticas públicas y la inserción de la República Dominicana en el contexto internacional.
De su lado, el expresidente Fernández agradeció a la comunidad universitaria la distinción de que fue objeto, y definió a la Universidad París VIII como una institución de renombre internacional, abierta a los estudiantes de todos los orígenes, lo que la convierte en escenario particularmente sensible a los desafíos del siglo XXI.