SANTO DOMINGO, el 20 de Abril de 1931, el Congreso Nacional aprobó una ley en virtud de la cual reconoció la personería jurídica de la Iglesia Católica.
La decisión del Congreso Nacional, el 20 de abril de 1931, constituyó una medida que marcó una nueva etapa en las relaciones de la República Dominicana con la Iglesia Católica.
En el año 1952 el Gobierno dominicano también suscribió un concordato con el Vaticano, el cual se mantiene en vigencia.