El vicesecretario general de Hezbolá, jeque Naim Qassem, denunció que el plan presentado por el presidente de EE.UU., Donald Trump, para la Franja de Gaza es en realidad un «plan israelí con apariencia estadounidense» que sirve al proyecto expansionista del «Gran Israel».
Durante un acto conmemorativo, Qassem afirmó que la propuesta fue modificada en reuniones con Benjamín Netanyahu para adaptarla «completamente a Israel». Según el dirigente, el plan busca lograr por la vía política lo que «fracasó en su intento mediante la agresión y las masacres»}
Qassem identificó que uno de los objetivos de la propuesta es «limpiar a Israel» ante la creciente ola mundial que lo condena, manifestada en las decisiones de Naciones Unidas y la escalada del movimiento popular en países de América y Europa.
«El plan surgió como una forma de suavizar la imagen», señaló, y como prueba del descrédito de Tel Aviv mencionó la «Flotilla Global Sumud», extendiendo un saludo especial a España por su postura diferenciada.
El dirigente de Hezbolá advirtió que la propuesta está «llena de peligros», ya que contempla entregar la administración de Gaza a un ente internacional, quitando al pueblo palestino la responsabilidad de gestionar sus propios asuntos.
Qassem subrayó que el proyecto del «Gran Israel» es una amenaza para toda la región y no solo para Gaza. Sin embargo, subrayó que lo presentado es «un plan y no un acuerdo», por lo que esperarán «la palabra decisiva de los palestinos»