El pueblo dominicano celebra con entusiasmo el inicio de la Semana Santa. Son días de reflexión y recogimiento espiritual. Pero también temporada de asueto y esparcimiento para centenares de miles de vacacionistas, quienes aprovechando la pausa laboral, se desplazan a diferentes centros hoteleros, playas, balnearios, campos y montañas de esta encantadora nación.
Vanguardia del Pueblo se incorpora junto a la sociedad a la conmemoración con el espiritu orientador propio de su compromiso con el fomento de los valores exhaltados desde su fundación.
Compartir la reflexión cristiana con el disfrute de los encantos terrenales en familia y con apego al respeto y la moderación, es la ruta que invitamos a transitar durante esta jornada que el calendario marca con especial distinción y que otros muchos pueblos del mundo acogen con tanto entusiasmo y veneración como el nuestro.
Por eso hemos querido mostrar el mejor empeño en colocar en nuestro diario digital las orientaciones y programas de tradición cristiana, guías para el sano esparcimiento, como las recomendaciones de nuestras autoridades en materia de prevención para el disfrute pleno de la temporada, con el menor riesgo y situaciones lamentables.
Nuestra eficiente colaboradora Indhira Aquino nos adelanta el programa de actividades preparadas por la iglesia para la Semana Mayor. Lugares, días y horarios de las principales celebraciones junto al significado de cada uno de estos días especiales del calendario.
De la misma manera, un equipo de reporteros y colaboradores nos llevarán de la mano para mostrarnos, día a día, como se van desarrollando las actividades durante la jornada en la que se registra la mayor movilidad de personas por todo el país cada año.
Acogernos a la reflexión que nos conduzca a ser mejores seres humanos y ciudadanos responsables, como seguir con todo rigor las orientaciones de nuestras autoridades preventivas, es el llamado y la esperanza de Vanguardia del Pueblo para que hagamos de estos días una Semana Santa de reflexión y esparcimiento que podamos recordar con la menor tristeza y gran alegría.