Como vocero escrito del Partido de la Liberación Dominicana celebramos la exitosa jornada realizada por la organización política el pasado domingo, 27 de octubre, con la que se concluyó la parte electiva del X Congreso Ordinario Reinaldo Pared Pérez.
Sin duda alguna lo que hizo el PLD es un ejemplo de la democracia a lo interno de una organización política, que bien debe servir para ilustrar a los demás partidos del sistema.
Una competencia en la que primó el respeto, donde nadie fue denigrado y en la que el clientelismo y la actividad grupal están totalmente alejadas.
Se ha hecho una elección transparente mediante el uso de los medios electrónicos, y confirmándolo posteriormente con las huellas impresas dejadas en los miles de votos depositados en las urnas, colocadas en el centro deportivo, convertido en recinto electoral.
De estas elecciones obtenemos también una lección, que debe servir de ejemplo al sistema electoral dominicano y es la bondad del voto automatizado, que refuta las banalidades y mentiras en su contra.
Esta forma de votación garantiza resultados ágiles, que alejan dudas y ofrece tranquilidad y sosiego entre los electores.
El PLD ha servido de ejemplo para que los partidos políticos del sistema mejoren sus procesos internos, aseguren la transparencia y legitimidad en la escogencia de sus autoridades.
El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) se propuso en el X Congreso Ordinario Reinaldo Pared Pérez en curso fortalecer sus estructuras para ir en defensa del Pueblo dominicano, que sufre el infortunio de una gestión que gobierna tentando, ensayando, improvisando, y lo ha logrado.
Resta muy poco para que concluya el X Congreso del PLD, tiempo y espacio suficiente para reafirmar que esa organización, fundada por el Profesor Juan Bosch, ha salido fortalecida de la actividad congresual, logro que se refleja ya en una mejoría y madurez de la democracia dominicana.